La Organización PUCARA (Pueblos Catamarqueños en Resistencia y Autodeterminación) grabó un video que recoge el testimonio de Camilo Condorí, integrante de la familia que vive más cerca de la empresa Livent, que explota el yacimiento de litio del Salar del Hombre Muerto.
Camilo y su familia vivieron durante muchos años en una vivienda propia en el lugar que ellos habían elegido por la ubicación, la sombra, la cercanía del agua y las vegas, pero esa vivienda fue destruida por la construcción del dique. Entonces, desde la empresa le ofrecieron a la familia Condorí una especie de conteiner de chapa, un módulo que “contamina el paisaje, que no responde a las necesidades de sus habitantes, que ignora y desconoce los modos de construcción del lugar y sus necesidades. Esto es lo que ofrece Livent. Un insulto a la dignidad de los habitantes del Salar del Hombre Muerto”, según la apreciación de PUCARA.
En el testimonio del video, Camilo asegura que la empresa no ayuda a la comunidad. Muestra las vegas, que antes tenían agua y donde pastaban los animales, ahora secas, sin vegetación. “Antes que venga la empresa se podía criar de todo, ovejas, llamas”, dice Camilo, que ve con mucho pesimismo el futuro de los habitantes del lugar. “Ahora qué van a comer si está todo seco, ahora ya quedan unas cuantitas”, dice.