La Corte Suprema tiene entre sus fallos pendientes un recurso presentado por vecinos de Andalgalá, Catamarca, que busca frenar los nuevos emprendimientos mineros para la región. Silvina Reguera, una andalgalense que vive en Buenos Aires, nos dio más detalles de este recurso. También hablamos de los desastres ambientales cercanos de Minas Gerais en Brasil y Jáchal en San Juan, y de algunos funcionarios locales y nacionales. La Asamblea del Algarrobo planea nuevas movidas.
En 2010 se presentó un amparo donde pedíamos por el ambiente de los habitantes del pueblo para vivir en un lugar sano. Fue en relación al emprendimiento de Agua Rica que aún pretende explotar el Cerro Aconquija, que es nuestro tanque de agua y está a 14 kilómetros en línea directa del pueblo. Este emprendimiento sería tres veces más grande que el de Alumbrera. Ahí empezó una lucha tremenda contra esa multinacional, y ahora estamos en la instancia de la Corte Suprema. Lo que se pide es la nulidad del acto administrativo, que violó la ley general del ambiente. Estamos esperando que se resuelva a favor del pueblo, y por esa razón estuvimos en diciembre toda una semana, como forma de hacer presión, entregando panfletos en la puerta de la Corte, con banderas, remeras y volantes, y también asesorando a la gente porque los que pasan se prenden, les interesa y preguntan qué es esto, preguntan dónde es Andalgalá y te dicen que la minería no, que es muy fea. La cuestión es que estos días estamos con mucha fe de que la resolución va a salir a favor del pueblo, venimos hace mucho tiempo luchando contra esta empresa y la verdad que es muy agotador”, expresó Silvina Reguera, integrante de la Asamblea El Algarrobo de Andalgalá.
En relación a la empresa Agua Rica, agregó: “es multinacional, multimillonaria, compra voluntades. Catamarca es un feudo minero donde por suerte pudimos sacar el expediente de ahí porque si no se nos caía el amparo. Hace casi 6 años que lo presentamos, una vez que lo trajimos para Buenos Aires se empezó a mover. En 2014, también para diciembre, hicimos un acampe frente a la Corte. Esta es una lucha permanente, constante, vivimos en permanente vigilia, dormimos con un ojo abierto y el otro cerrado, porque ellos siempre están dando un paso adelante y nosotros tenemos que dar dos, además de manejarnos con lo que juntamos, porque económicamente no tenemos fondos, no tenemos recursos, y nuestro único objetivo es que se vaya la minería, es el objetivo más limpio y puro que tiene esta lucha, aquel que no entienda eso es porque algo raro tiene”.
En caso de que la Corte Suprema se pronuncie a favor del amparo de los vecinos, se podrá impedir la apertura de nuevos emprendimientos; sin embargo el fallo no detendría los que ya se encuentran funcionando como La Alumbrera. “Alumbrera ya está terminando, ya se van –expresó Reguera–. Lo que ellos pretenden es explotar Agua Rica y después ir por Bajo El Durazno y todos los demás emprendimiento que hay en nuestra zona. Pretenden usar la misma maquinaria, la misma implementación de todo el equipamiento que tienen para ponerlo en marcha con Agua Rica. Ellos evitan gastar, ellos siempre ganan. El amparo nuestro es para que no empiece Agua Rica, ni ninguno de los otros emprendimientos que tienen previstos, porque son todos dañinos, porque es mentira que la minería es sustentable, que se la regula, que cuida el ambiente, ellos se manejan con mentiras a diferencias de nosotros que con pruebas nos manejamos con muchas verdades. Y la verdad que siempre decimos que si no nos dejan vivir, no los vamos a dejar dormir”.
Los espejos de Brasil y San Juan
A comienzos de noviembre, en Minas Gerais, se rompió un dique de cola, que es el lugar donde se acumulan todos los tóxicos de las mineras; estos desechos contaminantes inundaron con su lodo mortal todo el pueblo, causando muertos y desaparecidos, mientras que los sobrevivientes debieron mudarse perdiendo absolutamente todo. Le consultamos a Reguera qué sintió cuando vio las imágenes de este derrame que dejó la ciudad brasileña inhabitable: “fue tremendo, ese es un ecocidio a mano armada pero muy mal, es irreversible, y a nosotros viendo eso y viendo lo que pasó en San Juan, donde se derramaron millones de litros de cianuro que contaminó el agua que los habitantes usaban para tomar, decimos qué más muestras hacen falta para decirle NO a la megaminería, que alguien me explique porque no entiendo, cuando ellos hablan de minería sustentable, del cuidado del medio ambiente, qué otro ejemplo necesitan, además convengamos que Alumbrera ha dejado un gran daño que en caso de aprobarse Agua Rica, que no se va a dar, va a ser tres veces peor, es un desastre el que han hecho”, aseguró.
La Retaguardia consultó a la asambleísta acerca de si este tipo de noticias, como los derrames en Minas Gerais y Jáchal, tienen difusión en Andalgalá: “claro que sí –respondió sin dudarlo–; nosotros estamos en permanente asamblea, combinada con el grupo acá de lucha y de los abogados, todas estas cuestiones se discuten, se difunden. En Andalgalá todos los sábados antes de la caminata se cuentan todas las cosas, hay una pantalla gigante donde se pasan todos los videos, y siempre hay vecinos que cuentan lo que está pasando en el resto del mundo y en los demás emprendimiento mineros. Lo de Minas Gerais también fue un lodo tóxico que está llegando al mar, eso se va a desparramar de una manera tremenda”.
De traidores, impresentables y socios
Hace 4 años Alejandro Páez ganó la intendencia de Andalgalá. Lo hizo con un discurso antiminero y a partir de una coalición entre los partidos Proyecto Sur y Movimiento Socialista de los Trabajadores. Al poco tiempo, Páez modificó su postura, o mostró quizás su verdadera cara; sin embargo fue reelegido.
“Páez es un reverendo traidor”, lo definió duramente Reguera. “Él estuvo en la represión de 2010 ayudando a los vecinos y mediando para que no les peguen –continuó–; en ese momento pensamos que era un buen candidato para hacerle frente a (José) Perea, que era el intendente anterior que mandó a reprimir. El asambleísta que estuvo como secretario de Minería con Páez –el asambleísta Sergio Martínez- pensó que podría haber hecho un buen equipo para unirse en esta lucha y cuando se dio cuenta de que era un traidor al pueblo y que él no podía hacer nada, no le quedó otra que salir. Lamentablemente nosotros no tenemos la ventaja que tiene Famatina que cuenta con el intendente, el cura y diputados de su parte, además de todo el pueblo está unido hasta la policía que se sacó los uniformes en la primera represión y los quemaron ahí porque no iban a ir a reprimir. Nosotros no tenemos esa ventaja, en ese sentido somos huérfanos de las instituciones, tenemos al enemigo en casa y no sé por qué Páez vuelve a ganar, porque él primero dice que fue antiminero, cuando estuvo en el primer mandato ya era prominero, recibía dinero de las regalías y después para volver a ganar volvió a ser antiminero, no entiendo por qué. También es cierto que las mineras pagan campañas políticas, y estoy muy segura que la de él se la pagó la minera, porque a través de él pudo hacer muchas cosas, porque sino ¿cómo se entiende que haya hecho calles nuevas, instituciones nuevas y todo lo demás?. Igual es raro que haya ganado otra vez”.
La asambleísta aseguró que para ser reelegido, Páez volvió a tomar el discurso antiminero de manera descarada y a pesar de no haber estado nunca junto a la lucha de los vecinos: “nunca fue a las caminatas, nunca se puso del lado del pueblo, nunca nos dio audiencias, se cansaron de pedirle audiencias para hablar, para poder hacerlo entrar en razón, nos ninguneó como nadie. Siempre estuvo prendido con la gobernadora (Lucía Corpacci), siempre estuvo en contra del pueblo. Todo lo que se pedía, se nos negaba”.
Reguera también tuvo duras palabras para con el futuro ministro de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, Sergio Bergman, quien antes de asumir adelantó que no tiene conocimiento técnico en el área para la que fue designado por Mauricio Macri: “es un impresentable, no tiene idea de lo que dice, no tiene idea de lo que va a hacer, él mismo lo dijo. Espero que se ponga las pilas, que se ponga a estudiar, porque podría ser que sorprenda a todos, pero no tengo mucha fe en eso, no hay que olvidarse que el modelo de Cristina (Fernández) es minero y el de Macri también porque son socios de las mineras. La economía argentina está bancada por la soja y la minería, que son contaminantes y extractivas, hay mucho dinero en el medio, producen violaciones de derechos humanos también”.
Hacia el final de la charla con La Retaguardia, Silvina Reguera reiteró la expectativa de los asambleístas en relación a una inminente resolución en su favor de la Corte Suprema. Además, aclaró que el máximo tribunal también tiene entre sus fallos pendientes una causa judicial, de nombre Cruz y que lleva adelante el fiscal Gustavo Gómez, que apunta en este caso a los emprendimientos mineros La Alumbrera y Bajo El Durazno: “ojalá también se resuelva porque eso nos beneficia mucho a nosotros”, aseveró la asambleísta andalgalense. Por estos dias, los asambleístas están preparando acciones las próximas acciones. Andalgalá no es un pueblo fácil de doblegar y sus habitantes están dispuestos a jugarse la vida en defensa del agua.