Alza en costos de proyectos y caída de precios de metales afectaron los cálculos.
Los ejecutivos y los accionistas del sector minero están pagando el precio por una ola desenfrenada de fusiones y adquisiciones durante la década pasada que alcanzaron un monto total de US$ 1,1 billón (millón de millones). Las mayores mineras y compañías de acero del mundo amortizaron cerca de US$ 50.000 millones en valoraciones de proyectos durante el año pasado y la “fuga” de dinero podría continuar durante la temporada de resultados a medida que los administradores reevalúan las onerosas adquisiciones realizadas en los últimos años.
Anglo American, Vale y Rio Tinto lideraron las amortizaciones debido a que la caída de los precios de los metales, el alza de los costos de los proyectos y la desaceleración de la demanda obligó a hacer revisiones. Glencore podría amortizar algunos activos de cobre y níquel, mientras que BHP Billiton recortaría las valoraciones de las operaciones de aluminio, según Goldman Sachs y Sanford Bernstein.
“Las compañías están comenzando a sincerarse sobre varios de los errores que han cometido en los últimos años. No sería sorpresa ver más amortizaciones”, comentó a Bloomberg Television el administrador de BlackRock, Evy Hambro.
Los tropiezos de las adquisiciones y fusiones en la industria minera han estado acompañados de mayores costos de la energía, trabajadores y materiales de construcción. Eso ha recortado ganancias y debilitado el apetito de los inversionistas para concretar más acuerdos.
Los fracasos en acuerdos en proyectos de aluminio y carbón le causaron a Rio Tinto amortizaciones por US$ 14.000 millones, lo que de paso le costó la salida al CEO de la firma, Tom Albanese. Algo similar sucedió con la directora ejecutiva de Anglo American, Cynthia Carroll que dejará su cargo en abril, entre otras razones, por un recargo de US$ 4.000 millones en el valor de su proyecto brasileño de concentrado de hierro Minas-Rio.
Por otro lado, Glencore podría amortizar cerca de US$ 2.000 millones después de su adquisición de US$ 37.000 millones de Xstrata. En tanto BHP, la mayor minera del mundo por capitalización bursátil, podría rebajar el valor de sus activos de níquel y aluminio por cerca de US$ 5.000 millones.
La brasileña Vale está tomando un cargo de US$ 4.200 millones después de rebajar la valoración de una mina de níquel y su participación en el productor de aluminio Norsk Hydro, del que controla el 22% tras una compra en 2011. “Nuestra intención es limpiar el balance lo antes posible”, dijo a inversionistas el CEO de la firma, Luciano Siani.