Aministía Internacional ha denunciado este jueves 22 de marzo las prácticas poco éticas de ciertos fabricantes de coches eléctricos por producir baterías con métodos intensivos con combustible fósil.
La ONG de derechos humanos argumentó que después de años de prácticas industriales no reguladas para la extracción de los minerales utilizados en las baterías de iones de litio, han conducido a «impactos perjudiciales para los derechos humanos y el medio ambiente».
«Encontrar soluciones eficaces a la crisis climática es un imperativo absoluto, y los coches eléctricos tienen un papel importante que desempeñar en este sentido», ha manifestado en un comunicado Kumi Naidoo, secretario general de Amnistía Internacional.
«Pero sin cambios radicales, las baterías que alimentan a los vehículos verdes seguirán estando contaminadas por abusos de los derechos humanos», añadió.
Violaciones de los derechos humanos
La organización internacional explicó que había documentado graves violaciones de los derechos humanos relacionadas con la extracción de cobalto en la República Democrática del Congo, incluido el trabajo infantil y la exposición a graves riesgos para la salud.
También dijo que las comunidades indígenas cercanas a las minas de litio en Argentina no son consultadas adecuadamente sobre los proyectos mineros en sus tierras y no reciben suficiente información sobre los impactos potenciales que puede tener en sus fuentes de agua, ya que la minería de litio consume importantes cantidades del vital líquido.
Impactos ambientales
El aumento de la demanda de los minerales necesarios para producir las baterías ha provocado un aumento del interés por la minería en aguas profundas.
Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), en mayo de 2018 la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos había otorgado 29 contratos para la exploración de yacimientos minerales de aguas profundas. La UICN estima que la minería comercial podría comenzar en 2020 en las aguas nacionales de Papúa Nueva Guinea y en 2025 en aguas internacionales.
Un estudio realizado por científicos de la Universidad de Exeter concluyó el año pasado que la minería en aguas profundas podría conducir a la liberación de elementos tóxicos y a la rápida pérdida de especies marinas.
Además, la producción de las baterías se concentra actualmente en países asiáticos como China, Corea del Sur y Japón, donde «la generación de electricidad sigue dependiendo del carbón y de otras fuentes de energía contaminantes», señala Amnistía Internacional.
Sin embargo, la ONG elogia a algunas empresas como Apple, BMW, Daimler y Renault por publicar datos sobre sus cadenas de suministro. Está instando a otros a hacer lo mismo y ha pedido a la industria del vehículo eléctrico que presente una batería ética y limpia en un plazo de cinco años.
Fuente:https://es.euronews.com/2019/03/22/amnistia-internacional-baterias-de-coches-electricos-danan-el-medio-ambiente