El periodista Guido Lombardi y el asesor y experto en medio ambiente de Perú Ernesto Ráez-Luna explican detalladamente la alarmante devastación ambiental causada por la “minería ilegal”.
Sobrevolando en el Carnegie Airborne Observatory, las zonas de Guacamayo y Huapetuhe en Madre de Dios, nos enseñan las miles y miles de hectáreas devastadas por las mafias y las corporaciones millonarias que están “saqueando” sin escrúpulos, el territorio.
Treinta mil hectáreas devastadas solo en los últimos tres años, que se suman a la acelerada deforestación y explotaciones petrolíferas, con la única perspectiva del incremento en su explotación.
Zonas habitadas por pequeñas poblaciones que dependen del agua y el bosque, ríos y quebradas se encuentran permanentemente contaminadas.
Zonas que han sido envenenadas por plomo y mercurio que bañan el territorio. Zonas donde ya no quedan rastros de vida, donde los árboles están muriendo “de pie” totalmente asfixiados por los “limos y el lodo envenenado y putrefacto” que ha quedado con la explotación del oro.
La “codicia humana” está destruyendo de forma imparable y preocupante el equilibrio de uno de los ecosistemas más importantes de nuestro planeta.
Alarmantes imágenes tomadas en 2013 han registrado el daño ambiental que se está causando a este pulmón del planeta, ante las cuales no podemos estar indiferentes.