La información fue confirmada por un diputado de la provincia de Copiapó, República de Chile, quien detalló que se ha firmado un convenio con la provincia de San Juan, la que proveerá agua para la explotación minera a cielo abierto, la agricultura y para consumo humano. El legislador dijo que ya están en marcha las obras de captación de las aguas del Río Blanco que tiene su origen en la Cordillera Riojana a una altura de 3.700 metros sobre el nivel del mar. La minera Lumina Copper, que extrae cobre, quedó habilitada para llevar agua al proyecto “Caserones” y usar 2.000 litros por segundo del río. La zona de Copiapó tiene grandes problemas de agua.
El Río Blanco nace en La Rioja y corre paralelo al límite suroeste entreésta y San Juan para luego superar el mencionado límite, ya sobre el departamento de Jáchal, que es donde se realizará la obra de captación de las aguas originarias de la provincia de La Rioja.
Cabe acotar que el río Blanco tomó connotación haya por el año 2010, cuando el entonces diputado Nicolás Martínez de Aimogasta, promovió la realización de un acueducto que nacía desde la misma vertiente del río, hasta la ciudad de Chamical cubriendo una extensión de 450 Km, para hacer frente a la sequía de Los Llanos.
Esta información debería ser considerada por parte de los legisladores de nuestra provincia, ya que las aguas del río Blanco que más allá de que pasa al territorio sanjuanino, tiene su origen en nuestra cordillera riojana y por ende es patrimonio de los riojanos.
Sabido es el alto caudal que las mineras a cielo abierto consumen, por ende el peligro de que el río se extinga o disminuya abruptamente su caudal es un peligro latente.
De acuerdo a lo mencionado por el diputado chileno, el acueducto tomará de las aguas del río, un caudal de 2.000 m3/s, una cantidad muy importante y desbastadora a la vez para la estructura hídrica del torrente.
Agua de La Rioja a las mineras chilenas
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile confirmó que tratados permiten llevar agua desde Argentina para proyectos mineros, según anunció el diputado chileno Carlos Vilches. La empresa minera Lumina Copper quedó habilitada para llevar agua al proyecto «Caserones», ubicado en la alta cordillera de la Región de Atacama, y hacer uso de 2.000 litros por segundo del río Salado (o río Blanco), en plena cordillera en la provincia de La Rioja, con el fin de extraer cobre en el norte chileno. La zona de Copiapó tiene grandes problemas de agua.
Lumina Copper pretende construir un acueducto a la vera del Paso Internacional Pircas Negras para asegurarse el flujo de líquido. De esa forma, liberará el uso de agua de las napas subterráneas, ya que la zona de Copiapó tiene grandes problemas en el abastecimiento del vital elemento.
Por ese motivo, la empresa minera Lumina Copper podría asfaltar el Paso del lado chileno.
Este miércoles, el gobernador Luis Beder Herrera remarcó en la XV Reunión del Comité de Frontera ATACALAR que en un año y medio aproximadamente todo el camino del lado riojano estará pavimentado y resaltó las principales características de la ruta, que permitirán que los camiones de gran porte puedan atravesarlo sin tener que cambiar la mercadería a otro tipo de transporte.
Para el legislador chileno, permitirá paliar la crisis hídrica que afecta a la zona que representa e indicó que «los permisos necesarios ya están otorgados y por eso los trabajos están en marcha».
Según Vilches, «un oficio del Ministerio de Relaciones Exteriores precisa que en el marco jurídico actualmente vigente, el Tratado sobre Integración y Complementación Minera, contempla tal posibilidad cuando se trate de utilizar recursos hídricos situados en un país para el desarrollo de un proyecto minero situado en el otro, y sin discriminación alguna, en relación con la nacionalidad chilena o argentina de sus inversiones».
Al ser consultado con respecto de la posibilidad de utilizar ese tratado para abastecer de agua potable a la provincia chilena de Copiapó en la Tercera Región de Atacama, explicó que «en un caso así, las aguas que se lograra traspasar a Chile no podrían ser utilizadas directamente para proveer a Copiapó». Al respecto, puntualizó que «ello podría beneficiarla sólo de forma indirecta, si el proyecto minero que obtuviera esas aguas desde Argentina, llegase a liberar otros derechos de aprovechamiento anteriormente constituidos en su favor y las restituyese para uso de la población».
Sostuvo que «lo importante aquí es lograr, por una parte, la concreción de los proyectos mineros y, por otra, basado en los Tratados Internacionales, que el agua que utilizaren para sus faenas fuese la traída desde Argentina».
«Hace algunos meses dije que Tratados con Argentina permiten traer agua desde el vecino país. El informe de la Cancillería así lo ratifica. Por tanto, hay que esperar que los proyectos mineros se pongan en marcha, y para ello – porque requieren de energía- debemos conocer los resultados de las presentaciones realizadas a los Tribunales de Justicia y que tiene paralizadas las obras de distintas Termoeléctricas», explicó Vilches.
Insistió que «las mineras, aprovechando los Tratados Internacionales, podrían liberar parte del agua que hoy ocupan en sus faenas y permitir que este recurso -hoy tan escaso en la zona- pueda ser utilizado en el abastecimiento o consumo de la población».