Acusan dictámenes amañados para explotación mineral pretendida por poderosas trasnacionales
Wixárikas entregan segunda carta a Peña en la que acusan la imposición de Héctor Moreno, presidente municipal de Real de Catorce
Las autoridades tradicionales y agrarias de las comunidades de San Sebastián Teponahuaxtlán y Tuxpan de Bolaños, Santa Catarina Cuexcomatitlán y Bancos de San Hipólito dirigieron una segunda carta al Presidente Enrique Peña Nieto, en la que señalan que aunque desde el 7 de febrero pasado entregaron una primera misiva en Palacio Nacional, «de lo cual no se ha obtenido ninguna respuesta efectiva», el paso de tiempo sin definiciones federales «están permitiendo el agravamiento de las condiciones para la protección real del santuario y sus ecosistemas, lo que hace cada vez más urgente contar ya con una decisión y una acción clara por parte del Jefe del Estado Mexicano».
A través de un comunicado de prensa señalan «muy especialmente la ilegítima e ilegal imposición» de Héctor Moreno, actual presidente Municipal de Real de Catorce ahora como presidente también del Consejo de Administración de la Área Natural Protegida de Wirikuta. «Dicho procedimiento se impuso no obstante el voto en contra de los delegados wixárika, ya que éste ha sido el más sobresaliente defensor de la actividad minera en la zona y los muy conocidos negocios que su familia y el mismo han tenido con las compañías mineras y agroindustriales desde hace mucho tiempo, configurándose un verdadero conflicto de intereses que no se tomó en cuenta».
Añaden que el pueblo wixárika considera que «con esta imposición» se están construyendo las condiciones para imponer mediante argucias legales y dictámenes amañados del propio Consejo la explotación mineral pretendida por poderosas trasnacionales, que patrocinan la intervención favorable a sus intereses en municipios en cuyos territorios se encuentra Wirikuta, encabezados todos por Moreno.
Indican que, además de que han denunciado «el actuar delictivo» de Moreno al promover la desinformación y confrontación entre los pueblos del desierto y el pueblo Wixárika, les parece una ofensa al estado de derecho dicho nombramiento.
«En el mismo sentido denunciamos que al mismo tiempo el actuar omiso o lento de las autoridades federales han posibilitado que las compañías tomateras han estado ampliando las áreas deforestadas y la acelerada perforación de pozos profundos para aumentar la extracción de los escasos acuíferos, notándose ya la desecación o disminución de manantiales que surten a poblaciones como Wadley y Estación Catorce. Lamentablemente la aún vigente falta de criterios consolidados de la autoridad federal están profundizando la problemática en varios de nuestros lugares sagrados como es ahora el caso de Haramara, donde se están dando concesiones turísticas a hoteles que convertirían nuestros rituales ancestrales en parque de diversiones de sus clientes».
No obstante la situación descrita, añaden que comunicaron a Peña Nieto que mantienen su confianza en que podrá responder a sus responsabilidades como jefe del Estado Mexicano, todavía de manera oportuna, dadas las intenciones reiteradamente declaradas a favor de los derechos humanos y en el combate de los factores y efectos del calentamiento global. Para esto estamos llamando a que se revisen las sólidas investigaciones y opiniones de los importantes científicos que se expresaron oficialmente sobre el caso y que constan en los expedientes de la Comefer para la resolución del caso que quedó inconcluso.
«Ahí está perfectamente acreditado que autorizar en las condiciones actuales la actividad minera, equivale a un genocidio anunciado de los miles de habitantes de la zona y su área de influencia. No debiera de haber titubeos ante la evidencia y no creemos posible que se piense actuar como si nada de esto existiera, ni ir más atrás de lo ya logrado, sería un verdadero absurdo».
Reiteran que los derechos les asisten, al igual que la hermandad que tienen con los pobladores del santuario, a quienes a quienes, dicen, se les ha ocultado y negado la información a que tienen derecho sobre las consecuencias que enfrentarían en caso de permitirse la minería. «Ante esta situación hemos desarrollado proyectos alternativos en localidades de la región que están demostrando que no es la minería la única opción económica que tienen para superar las condiciones de extrema pobreza que viven; todo lo contrario, mediante proyectos sustentables y ecológicos es la única forma de garantizar bienestar a esta y a las futuras generaciones del desierto».
Las autoridades tradicionales y agrarias de las comunidades de San Sebastián Teponahuaxtlán y Tuxpan de Bolaños, Santa Catarina Cuexcomatitlán y Bancos de San Hipólito reiteran en su comunicado que Wirikuta es el corazón de su cultura, que su destrucción es la destrucción de su pueblo, que de ninguna forma abandonarán la lucha y que en los casi tres años que la han mantenido, «no solo se ha logrado demostrar la razón y el derecho que nos asiste, sino más aun se han construido con apoyo de muchos especialistas, alternativas muy avanzadas como las características del enfoque biocultural de la protección federal que se requiere y que es parte del conjunto de compromisos adquiridos por México en los foros e instancias internacionales en que participamos como país».