Arturo Rodríguez García
Un accidente en una tolva de la central carboeléctrica Carbón II de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en Coahuila, provocó hoy la muerte de cuatro trabajadores, entre ellos un menor.
Todas las víctimas eran empleados de una empresa contratista.
De acuerdo con información preliminar de la Fiscalía General del Estado (FGE), dentro en las instalaciones de la CFE laboraban los trabajadores Luis Mosqueda Ochoa, su hijo, Luis Joel Mosqueda Martínez, así como José Jiménez Amador y su hijo, Pablo Iván Jiménez Aguilar, este último de 16 años.
El luto de las dos familias se prolongará debido al grado de destrucción de los cuerpos, pues éstos tendrán que ser identificados mediante pruebas de ADN u odontológicas.
En un escueto comunicado emitido por la CFE, se indica que el siniestro ocurrió alrededor de las 04:50 horas de este miércoles, cuando los empleados de la empresa Buffet Integral de Construcciones Monclova S.A. de C.V. (Bicomsa) –que es una contratista gubernamental– realizaban trabajos de mantenimiento en un silo que almacena mineral en la carboeléctrica.
El incendio generado por la explosión se prolongó según la CFE hasta las 05:30 horas, luego de que brigadas de la propia central eléctrica habrían combatido el siniestro.
En el estallido, del que la FGE informó que los cuerpos habrían quedado bajo 80 toneladas de carbón, no se reportaron más lesionados.
La FGE, dio a conocer que dichos trabajos implicaban el uso de soldadura, lo que habría generado una chispa en material inflamable que detonó el estallido.
Hasta el momento, la CFE no ha informado la razón ni las condiciones de seguridad en que se realizaban los trabajos de soldadura, pues como es sabido, éstos deben ser realizados en condiciones especiales de seguridad debido a la inflamabilidad del carbón, característica del mineral que precisamente, permite la generación de electricidad con altas temperaturas.
CFE en evidencia
El siniestro deja en evidencia la ausencia de medidas de seguridad por parte de la CFE, así como la permisividad para el trabajo de menores en sus instalaciones.
En Nava, Coahuila están ubicadas dos carboeléctricas: la José López Portillo y la Carbón II. La primera tiene una capacidad de generación de mil 200 MegaWatts (MW) y la segunda, de mil 400 MW. Esta última es considerada una de las más grandes en su tipo de América Latina.
Paradójicamente, la CFE y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) implementaron en mayo pasado un sistema de responsabilidad social y seguridad minera que evalúa a los productores de carbón para determinar si se procede a comprarles mineral o no, para abastecer las dos carboeléctricas.
Entre los aspectos a evaluar se encuentra el cumplimiento de las normas de seguridad y el no empleo de menores. Por si fuera poco, entre las medidas de seguridad que establece la reglamentación federal, está precisamente la prohibición de equipos de soldadura inflamables en el manejo carbonero.
Dicho sistema fue anunciado y divulgado ampliamente por el titular de la STPS, Javier Lozano Alarcón, luego de que el 3 de mayo murieran 14 trabajadores en el pozo carbonero Binsa, en Sabinas Coahuila, entre los que un menor resultó mutilado de uno de sus brazos.
Bicomsa, historial de anomalías
De acuerdo con el registro de proveedores gubernamentales Compranet, Bicomsa es una empresa que realiza trabajos de obra civil, mecánica y eléctrica.
Entre algunos contratos obtenidos por Bicomsa, se encuentran obras de pavimentación para el gobierno del estado de Coahuila, así como de mantenimiento para la CFE, en las centrales carboeléctricas José López Portillo y Carbón II, ambas ubicadas en Nava, un municipio coahuilense localizado en la zona fronteriza de esa entidad con Estados Unidos.
La contratista es propiedad del empresario Gilberto del Moral Domínguez, quien desde 2009 ha sido acusado de registrar a sus trabajadores por debajo de su salario real ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), además del incumplimiento de otras obligaciones laborales como el pago de aguinaldos.
Dicha práctica es común entre los productores carboneros de la región norte de Coahuila, donde Bicomsa tiene operaciones.
Apenas en octubre, otro trabajador de esa empresa murió prensado por una grúa en la misma zona, por lo que en dos meses, suman cinco trabajadores muertos en condiciones de inseguridad laboral de esa empresa.