Por Nicolás Boeglin (*) Mayo 2016
Resumen: La reciente demanda contra Panamá registrada ante el CIADI por una empresa minera norteamericana constituye una nueva señal sobre la peligrosa deriva del arbitraje inversionista-Estado en América Latina. En este artículo, se pretende dar algunos elementos sobre la práctica reciente del CIADI, y sobre la imperiosa necesidad de remediar los alcances de algunas cláusulas a favor del inversionista en los tratados bilaterales de inversión (TBI) suscritos en los años 90, que reaparecen en los acuerdos de libre comercio firmados en los años 2000.
Según las últimas actualizaciones de la página oficial del Banco Mundial, el pasado 15 de abril, se registró formalmente ante el Centro Internacional de Arreglo de Disputas entre Inversionista Extranjero y Estado (CIADI) una nueva demanda contra Panamá. La limitada información con la que el CIADI da usualmente a conocer detalles sobre las demandas registradas explica que, al momento de redactar estas líneas (2 de mayo del 2016) en la ficha técnica se lea, con relación a la empresa demandante:
“Dominion Minerals Corp. (nationality not available) “. De igual forma, el no tener acceso al texto de la demanda como tal desde el mismo sitio del CIADI obedece a la misma razón.
En realidad, se trata de una demanda interpuesta por la empresa minera norteamericana Dominion Minerals (ver texto completo de la demanda reproducido en su integralidad en el sitio canadiense privado de Italaw), por un monto de 268 millones de US$ (ver punto 8 de la demanda).
(*) Nicolás Boeglin, Profesor de Derecho Internacional Público, Facultad de Derecho, Universidad de Costa Rica (UCR).
http://www.bilaterals.org/?a-proposito-de-la-reciente-demanda&lang=en