17 de enero
Estimados Colegas y Amigos:
El día de ayer, un contingente de aproximadamente 200 agentes de la PNC y dos camionadas de soldados, en compañía del fiscal de La Tinta Carlos Rafael Andrade, llegaron a los cinco lugares que habían sido desalojados la semana pasada por las autoridades a petición de la CGN, con el propósito de desalojar a las personas que habían reocupado estos terrenos.
En el Lote 8, los pobladores huyeron antes de que llegaran las autoridades y los policías procedieron a quemar las casas que no habían sido quemadas la semana pasada así como unas estructuras rústicas nuevas.
En la comunidad La Paz, debido a la presencia de representantes de la PDH (que estaban en el área debido a otros compromisos), no hubo quema de casas ni desalojo. Según las informaciones recibidas, en las comunidades Las Pista y Revolución, los pobladores huyeron antes de la llegada de las autoridades y no hubo capturas.
En la Unión, en las afueras del pueblo de El Estor, hubo un enfrentamiento entre pobladores y los policías. Según las informaciones recibidas, la PNC lanzó bombas de gas lacrimógeno entre las casas donde habían mujeres y niños, algunos de ellos que después quedaban intóxicados por los efectos del gas.
Una turba se formó, comformada por algunos pobladores de la Unión con otros jóvenes (presuntos mareros) y botaron un poste de energía eléctrica tapando la entrada y salida hacía el oeste de El Estor. Hubo disparos, pero no hay reportes de heridos ni detenidos. Los Patrulleros del Pueblo, conformado por el Alcalde de El Estor, se reunieron y armados llegaron al lugar de los hechos disparando al aire desde 3 pickups y la turba se dispersó. Los PNC que llegaron para el desalojo se retiraron en horas de la noche del pueblo, dejando la seguridad en manos de los Patrulleros, presuntamente.
Desde la Secretaría de Asuntos Agrarios nos informaron que habían planes de quemar las instalaciones de la Defensoría Q’eqchi’ durante la noche. A petición de nosotros, se solicitó a la Comisaría Distrital que no hubiera una salida de todos los policías, para mantener el orden y no dejar la comunidad sin protección policial. Esta petición sí fue atendida y la noche pasó sin mayor novedad.
En horas de la mañana de hoy, los líderes de las comunidades expresaron que no van a reocupar los terrenos y esperan la reunión programada para el día de mañana propiciada por el obispo de Izabal, Monseñor Gabriel Peñate, dando un plazo de 15 días para que hubiera algún resultado.
P. Daniel Vogt Director y Representante Legal Asociación Estoreña Para el Desarrollo Integral, AEPDI El Estor, Izabal, Guatemala