La británica Alexander Gold Group planeaba desembolsar US$ 40 millones
Jueves 26 de junio de 2008
Por Carlos F. Pastrana
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SALTA –
Con argumentos como la "inseguridad jurídica" generada desde el gobierno nacional y la "falta de interés" de las autoridades provinciales, la británica Alexander Gold Group LTD decidió suspender su proyecto de aprovechamiento de cobre y plata en el sureño departamento de Metán, que preveía una inversión de US$ 40 millones.
De esa cifra, 8 millones ya se aplicaron a la realización de un informe de impacto ambiental para garantizar que no haya contaminación. Así lo señaló el gerente de operaciones de la empresa, Graham Parsons, quien, consultado por LA NACION sobre cuál de los factores influyó más, respondió: "Obviamente, ha sido un golpe fuerte la actuación del gobierno central respecto de la aplicación de retenciones, no por las retenciones en sí, sino porque está jugando con las leyes y elimina cualquier garantía jurídica. Eso manda un fuerte mensaje de que la legislación que tenemos hoy en día no significa nada, porque puede cambiar mañana".
A fines del año anterior, el Gobierno eliminó, para los proyectos futuros, una serie de exenciones al pago de retenciones que beneficiaban la actividad. Los proyectos mineros son de muy largo plazo y las empresas y los inversores argumentan que necesitan seguridad de que el régimen vigente cuando comienzan seguirá sin cambios hasta terminar el emprendimiento, porque, si no, "no van a arriesgar inversiones multimillonarias", argumentó Parsons. El ejecutivo añadió que este "golpe fuerte combina con la indiferencia que encontramos a nivel provincial", ya que, afirma, en lugar de alentar la confianza de las empresas, "esta administración no ha actuado".
Por otra parte, al iniciarse la prospección hubo resistencia de pobladores de la zona, que constituyeron la asociación Vecinos Autoconvocados por un Medio Ambiente Sano (Vapumas), que organizó conferencias, cortes de ruta y manifestaciones, y desde donde los pobladores reclamaron a las autoridades provinciales que no autoricen la explotación a cielo abierto. Tuvieron el respaldo de intendentes, legisladores y concejales, salvo del municipio de Río Piedras, donde está radicado el emprendimiento. Parsons atribuyó los cuestionamientos a personas "con sus propios motivos, que alientan el miedo y dicen barbaridades, mentiras, exageraciones, y sin ningún fundamento técnico". La empresa proyectaba crear 250 empleos, "en una zona con una desocupación de hasta 40%".
La exploración comenzó hace tres años, unos 130 kilómetros al sur de la capital. Tenía perspectivas de extenderse a otras áreas, luego de que la empresa realizó estudios en Jujuy y otras zonas de la provincia y se efectuaron sondeos, análisis y diferentes estudios en un "informe de impacto ambiental sólido, hecho técnicamente muy bien con profesionales provinciales y nacionales", recordó el empresario.
Proyecciones
Según sus proyecciones, el hallazgo de cobre supone una capacidad de producción cercana a las 5000 toneladas al año, además de la plata, volúmenes que hacían rentable el proyecto. Este cobre fino iba a ser uno de los primeros de su tipo obtenidos en el país. Actualmente se importa de Chile.
Parsons lamentó la pasividad de las autoridades de Minería, que "no quieren intervenir en el proyecto, el más importante de esta gestión, pero hay nada más que indiferencia" ante su actividad de prospección y exploración. El ejecutivo aseguró que se iba a emplear una tecnología única en el mundo, patentada por la empresa, que implica un mínimo impacto ambiental, con un método a base de amonio, que permite extraer el metal en forma selectiva de las rocas.
Los autoconvocados, por su parte, fundamentaron su postura en la defensa de la salud, evitar la desaparición de espacios naturales, la contaminación de los ríos y "el saqueo de riqueza". En el municipio de Metán, estos grupos lograron una ordenanza que limita la actividades mineras en la jurisdicción, y procuran medidas similares en Rosario de la Frontera y otras comunas.