15 de Febrero 2012
Minera San Xavier gasta 32 millones de litros de agua al día
Agricultura no interrumpe ciclo del agua, minería la contamina
En SLP un huracán esparció tóxicos de las piletas y mató fauna
Javier Hernández Alpízar, (segunda parte).– Los habitantes de los lugares donde han existido minas quedan después, como en el Cerro de San Pedro en San Luis Potosí (SLP), más pobres y enfermos, “el dinero que les dieron por sus tierras ya se lo gastaron”, dijo Rurik Hernández. Hay en México varios casos de defensas exitosas ante proyectos mineros tóxicos. Asimismo, en Wirikuta, donde ante la amenaza de un proyecto minero en territorio sagrado de los wixáricas o huicholes, ellos se han organizado y su movilización ha incluido a amplios sectores de la sociedad, especialmente en el Distrito Federal. El desierto es un lugar rico en biodiversidad, expuso el integrante de la Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA), en una ponencia titulada “Minería, agua y metales pesados”.
Fue la participación más extensa durante el panel sobre la minería tóxica que tuvo lugar en el foro abierto del Ágora de la Ciudad el sábado 11 de febrero, al iniciar la campaña del Pacto por un Veracruz Libre de Minería Tóxica.
La entrada de la minería para extraer oro en México y países de América Latina es para dar un respaldo de la economía capitalista, en el contexto de su crisis económica. Almacenan el oro en lingotes en bodegas de alta seguridad como respaldo, expresó el integrante del FAO.
Las mineras no pagan impuestos, los exenta el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, expresó Rurik Hernández. El Impuesto Sobre la Renta (ISR) se les exenta por créditos fiscales. No nos beneficia como país; pero sí nos cuesta por la contaminación, la cual tendrá que tratar el gobierno mexicano con paliativos, con medicamentos, con incapacidades médicas y jubilaciones prematuras.
El Banco de México compró cien toneladas de oro (oro mexicano con sello canadiense), tal como vendemos petróleo crudo, pero compramos aditivos y productos refinados. Así, en la minería, les regalamos el oro y se los compramos en lingotes.
Hay en marcha unos ochocientos proyectos mineros en el país, abarcan entre el 25% y el 30% del territorio, equivalente al tamaño del estado de Chihuahua. El 70% del territorio mexicano es susceptible de explotación minera. Hay oro, plata, cobre, zinc, hierro, barita y otros minerales. Además existen otras minerías que no han sido traídas a México, las de tierras raras, vinculadas a la industria del armamentismo y a la nuclear.
La extracción de oro responde a los movimientos de las bolsas de valores, ahora sí, podemos medir cómo nos afectan los índices bursátiles: Si sube el oro llegan más mineras.
Sobrexplotación y contaminación del agua
Explicó cómo las minas van dejando ácido cianhídrico, gases tóxicos y metales pesados en el proceso. Llaman “beneficio” al procedimiento por el cual separan al oro de la tierra. Ponen unos dos gramos de cianuro por cada litro de agua.
El agua impregna la tierra de cianuro, el cual se percola o lixivia, absorbiendo el oro, la plata, el cobre.
Esto escurre, llega a la geomembrana y se acumula en las piletas de lixiviación. Luego, por métodos electrolíticos, separan los metales del cianuro. La Minera San Xavier gasta treinta y dos millones de litros de agua al día en el Cerro de San Pedro. Un lujo en una zona desértica. Tienen un pozo para extraer el agua, pues necesitan agua fresca para usarla.
En Guerrero, las aves toman agua con tóxicos y mueren. Por las noches salen camiones con los animales muertos en la mina. En el caso de Veracruz, hay una acuerdo internacional para proteger a las aves migratorias. Al matar aves, afectan también a la polinización y todos los servicios al ecosistema que prestan las aves migratorias.
En Mazapil, Zacatecas, y en San Xavier, SLP, se gastan unos 41 millones de litros de agua, en promedio. La masa se agua contaminada irá a los surtidores, a enfermar o a matar a los animales y a las personas. Hay estudios que estiman que del agua en el mundo, para 2025, solamente una de cada tres personas tendrá acceso a ella.
Ya en la ciudad de SLP padecen tandeos y el agua llega solamente en la noche, una o dos veces por semana. Tienen que contratar pipas.
Mineras comparan el gasto de agua que hacen con el de la agricultura, pero, revira Rurik Hernández, con la agricultura, además de que produce alimentos y el oro no se come, al agua no interrumpe su ciclo, en cambio la minería la usa intensivamente y la contamina.
Ya el 1.5 del territorio veracruzano están en manos de mineras, de calizas, cales arenas, gravas y pétreos, según los reportes oficiales sobre el estado, además de Actopan y Alto Lucero (donde opera la minera canadiense promotora de Caballo Blanco) hay proyectos y minas en Acayucan, Coatzacoalcos, San Juan Evangelista y otros municipios.
Las afectaciones no serán solo para la fauna, sino para la población, por Arroyo Agrio habrá camas de lixiviación. Si un huracán se lleva esa agua cianurada, ¿qué pasará? En SLP llegó el huracán Alex y contaminó con tóxicos y murieron muchos animales en la zona afectada.
De Carrizalillo, Guerrero, es la imagen más parecida a cómo se vería un tajo en Veracruz, por la semejanza del clima. El cerro (La Paila, Las Cruces y Bandera) desaparecería, como fue en San Pedro y en Carrizalillo. Y está también el problema del arsénico, el plomo y demás metales pesados.
Para que una mina opere en territorio mexicano, es la Secretaría de Economía la que da las concesiones. La Semarnat (Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales) debe revisar el impacto y el riesgo ambiental. Además, hay permisos de la Conafor (Comisión Nacional Forestal) y la Conabio (Comisión Nacional de Biodiversidad). También deben ver el asunto el Instituto Nacional de Ecología. La Comisión Nacional del Agua (Conagua). A nivel estatal , la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema), el Cabildo municipal, que debe dar el permiso al cambio de uso de suelo y hay otro también de Semarnat. Hay un permiso de construcción y así unos dieciocho permisos. En Veracruz la Secretaría de la Defensa Nacional ya le dio el permiso para las explosiones a Caballo Blanco.
Los gobiernos les dan todas las facilidades, de manera que el país está prácticamente regalado a las mineras canadienses, terminó el representante del FAO y la REMA.
La siguiente participante, Mina Navarro de jóvenes en resistencia alternativa (jra), de la Ciudad de México, profesora en al Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, dio la ponencia titulada: “La minería como proyecto global”.
En ella presentó a la extracción minera como parte del proyecto global del capital, uno de los ejes de desarrollo del mismo, tanto para México como para el mundo. Se trata de una ideal global e histórica.
Hay experiencias en las que han logrado detener estos proyectos en lugares donde la gente se organiza, hay resistencias en países como Perú y Argentina. Esta es una época marcada por el despojo y la destrucción ambiental. Una etapa en los más de quinientos años desde que el capitalismo se expandió a América, tras el descubrimiento. Anteriormente, las culturas ancestrales tenían una relación directa con la naturaleza, con un metabolismo distinto entre las personas y la naturaleza.
A partir del capitalismo, la naturaleza se vuelve mercancía y todo tiene precio. Esa “normalidad” –dijo Mina Navarro– ha sido impuesta, e implica que incluso nuestra vida tiene un precio.
En los años setenta, hubo una ruptura internacional muy importante. Frente a la crisis y para restablecer la dinámica del capital, se empiezan a utilizar estrategias de desposesión, despojo, de los bienes comunes, los que el capital llama “recursos naturales”. Este saqueo se realiza sin importar la vida del pueblo, de la gente.
La actual es una oleada de expansión del capital con su crisis ambiental, social, cultural, civilizatoria. Es una crisis de la forma civilizatoria capitalista sobre la que se construye la vida.
¿Qué podemos hacer ante esto como personas comunes?
Actualmente el capital va incluso en contra de los fundamentos que necesita para reproducirse y acumular. El Estado, como su instrumento, ha logrado establecer las prioridades para la expansión del capital. No necesariamente pasa que “tengamos el apoyo del Estado”, ya que los gobiernos se pliegan más a las lógica del capital que a las necesidades de la gente. El Estado viene actuando como un cirujano plástico, haciendo los territorios más atractivos para el capital, para su explotación. En los países de América Latina genera el andamiaje para explotar los recursos de acuerdo a las necesidades de otros países. Entre ellos, el petróleo y los minerales. No se genera desarrollo productivo, es un modelo extractivo exportador. Pero incluso “gobiernos progresistas”, en Sudamérica, enfrentan el reclamo popular porque mantienen esas mismas políticas extractivas, expresó la catedrática de la UNAM.
En la siguiente y última parte, las ideas de los otros participantes en el foro sobre minería tóxica en Xalapa.
El Pacto por un Veracruz Libre de Minería Tóxica invita a un festival el 25 de febrero desde las 12:00 horas, en la plaza Xallitic, con grupos como la Banda Guelaguetza, Los Macuiles, Soflama, Trío Tlacuatzin, Pati Ivision, Los Aguas Aguas, Rolando Alarcón Trío y otras actividades como kermés, talleres para niños y adultos, videos y pláticas sobre la mina Caballo Blanco. Información en www.lavida.org.mx, lavidaolamina.wordpress.com, lavida.mina@gmail.com y en Facebook: lavida anna y la mina o la vida.