Contaminados por residuos sólidos, relaves mineros y otras sustancias que generan reclamos. Defensor del Pueblo recomendó tres herramientas para reducir conflictos.
El Defensor del Pueblo, Eduardo Vega, celebró que el gobierno haya aprobado recientemente la ley de Consulta Previa debido a los conflictos existentes aún, sin embargo recomendó al Estado tres herramientas para poder terminar con los conflictos y mejorar la distribución de las ganancias a través de la extracción de recursos naturales: mejorar el monitoreo de proyectos de impacto ambiental, dar una ley de ordenamiento territorial para saber dónde existen problemas y dónde es posible la explotación de recursos y atender los reclamos de las poblaciones directamente afectadas.
Señaló además que actualmente existen 214 conflictos sociales de los cuales, la mitad son de carácter socio- ambiental relacionados sobre todo a la minería. “El Estado no se ha comportado a la altura del crecimiento económico con relación a la población más necesitada y ahora debe fortalecer la atención a la conflictividad social”, afirmó Eduardo Vega.
Para reforzar sus recomendaciones y el pedido al gobierno, detalló que actualmente el Perú explota solo el cinco por ciento de sus recursos naturales, siendo imperativo encontrar una solución definitiva para evitar los reclamos de la población.
Actividad contaminante
De otro lado, el biólogo Manuel Lora de la Asociación Marianista de Acción Social, afirmó que se han encontrado restos de arsénico, mercurio, nitratos, sulfatos, cadmio en las aguas de los ríos de la cuenca del Perejil (La Libertad) que pueden ocasionar enfermedades como el Cáncer con el paso del tiempo.
“Muchos de los pobladores de estas cuencas no presentan una buena salud y sobre todo no hay centros médicos cercanos donde se pueda atender estas enfermedades”, señaló el especialista.
Los análisis y recomendaciones de la contaminación y conflictos originados por la extracción de minerales fueron analizados en la presentación del libro “Vigilancia Ciudadana de la Calidad de Agua”, que fue realizada a través de un monitoreo de la sociedad civil en las tres cuencas de Perejil, Caballo Moro y Chuyuhual en La Libertad.
Willian López, del Instituto Peruano de Educación en derechos humanos y la Paz, afirmó que las empresas deben abrir sus puertas y permitir a la población tomar muestras del agua, incluso dentro de sus ambientes para comparar resultados. “Esta experiencia debe ser repetida pero por el Estado en otras partes del país. En La Libertad hay evidencias de contaminación y el Estado debe ser el gran promotor del monitoreo y participación ciudadana”, señaló.