El pasado 30 de setiembre del 2019 es una fecha que pasará a la historia, ya que el presidente Martín Vizcarra decidió disolver el Congreso de la República, luego de que la alianza fujiaprista se dedicara a boicotear por más de 3 años cualquier intento de reforma política y de justicia planteado por el Ejecutivo. La convocatoria de elecciones parlamentarias para el 26 de enero del 2020 puede ser un punto de quiebre para empezar a discutir las verdaderas reformas que el país necesita, por ahora la crisis política se mantiene, ya que la discusión de la disolución del Congreso se trasladará al Tribunal Constitucional.
Pasada la crisis, el gobierno debe concentrarse en atender la conflictividad social que se ha reactivado en el sur andino peruano, los bloqueos del corredor minero en Cusco y Apurímac, y el rechazo al proyecto Tía María en Arequipa son papas calientes que el gobierno de Vizcarra no puede soslayar. En este campo el Ejecutivo no ha sido muy diligente, por el contrario el abordaje de los conflictos ha sido declarar estados de emergencia, usar la violencia y la represión policial en las movilizaciones, así como criminalizar a líderes y dirigentes sociales que participan en ella. En sentido hay dos casos que se han activado estas últimas semanas en las provincias cusqueñas de Chumbivilcas y Paruro, por el uso de la vía del corredor minero de la empresa MMG Las Bambas.
Chumbivilcas: El caso de Ccapacmarca y Colquemarca
El 1 de octubre pasado en el distrito de Ccapacmarca, uno de los lugares por donde transita el transporte minero de Las Bambas, se ha desatado un nuevo conflicto dejando como saldo varios heridos y detenidos por un enfrentamiento durante el desbloqueo de la vía. Las comunidades denuncian la contaminación ambiental debido al paso de más de 500 camiones diarios de la mina, así como la inconsulta construcción de las vías a las comunidades, y el no pago por el derecho de servidumbre ni compensación por parte del Ministerio de Transportes y Comunicaciones y la empresa minera Las Bambas. Las comunidades exigen que se derogue el D.S. 011-2016-MTC que aprobó la recategorización de esta vía como carretera nacional.
Así mismo el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental – OEFA presentó públicamente el 27 de setiembre el informe Fiscalización Ambiental Corredor Vial Ámbito de la Provincia de Chumbivilcas, el cual respalda los reclamos de las comunidades respecto a la contaminación que causa la circulación del transporte minero. El OEFA informó que los resultados de las evaluaciones ambientales en los componentes de suelo, ruido, aire exceden los estándares de calidad ambiental, recomendando medidas preventivas y correctivas para la empresa minera, entre las cuales está la de “restringir el tránsito de los camiones de transporte de concentrado de Las Bambas en las localidades de Velille y Ccapacmarca, en el horario comprendido entre las 6 de la tarde y las 5 de la mañana del día siguiente”, asimismo se ordena a la empresa minera “la modificatoria y/o actualización de su EIA vigente en el marco del Sistema Nacional de Evaluación de Impacto Ambiental – SEIA y en base a los resultados de la fiscalización realizada”.
Paruro: Los reclamos y los últimos hechos registrados.
Al permanecer bloqueadas las vías del corredor minero por la ruta de Colquemarca y Ccapacmarca de Chumbivilcas, los camiones y encapsulados de la minera Las Bambas optaron por transitar por la vía alterna de la provincia de Paruro, es por ello que los pobladores de la zona de Ranraccasa, Paccaritambo, Ccoyabamba y Paruro acordaron el viernes 4 de octubre iniciar una medida de protesta respaldando las demandas de las comunidades de Chumbivilcas- El bloqueo de las vías se inició el lunes 7 en Ranraccasa, distrito de Yaurisque, lugar donde este martes 8 de octubre se han producido enfrentamientos, justamente al promediar las 11 de la mañana cerca de 100 efectivos de la PNP se hicieron presentes en la zona para proceder con el desbloqueo de la vía. Según testimonios de los pobladores y videos difundidos por las redes sociales, los policías intervinieron de manera violenta disparando perdigones y bombas lacrimógenas, lo que dejó como saldo cuatro mujeres heridas, una de ellas perdió el ojo izquierdo por el impacto de los perdigones, la señora fue identificada como Higidia Humpire Ataucuri (54).
El reclamo de la población, según señalan los dirigentes, es por el incumplimiento de los acuerdos de la asamblea multisectorial desarrollada en el distrito de Yaurisque el 21 de marzo pasado, acuerdo que fue ratificado por el Gobernador Regional del Cusco Jean Paul Benavente (22 de abril). En aquella reunión la minera MMG Las Bambas se comprometió a iniciar en junio el recapeo (arreglo) de la vía Huancaro – Paruro, y posteriormente el asfaltado de la vía Ranraccasa – Chumbivilcas. Los pobladores también reclaman que su provincia sea considerada como zona de influencia directa ambiental y zona de influencia indirecta social del proyecto Las Bambas, ya que por esta vía también transitan los camiones de la minera, además de plantear la reforma de la ley general de minería, entre otros.
Los derechos vulnerados en las comunidades son reiterativos y muestran un patrón que se repite en otras provincias del corredor minero; se afecta el derecho a la protesta social, a vivir en un medio ambiente sano y equilibrado, a la consulta previa, entre otros. Si bien se han instalado varias mesas de dialogo en Cotabambas, Chumbivilcas, Espinar y recientemente en Paruro, en la práctica no están resolviendo los problemas que denuncian las comunidades. A la larga el problema es el mismo de siempre: la forma como se gestiona los conflictos mineros desde el gobierno central, reprimiendo y criminalizando las protestas, estrategia lo único que genera es mayor violencia y afectación de derechos.
NOTA
El día de hoy jueves 10 de octubre el gobierno regional del Cusco, el Viceministerio de Gobernanza Territorial de la PCM y la empresa minera Las Bambas han convocado a reuniones para establecer mesas de dialogo en Chumbivilcas y Paruro.
Fuente:http://www.noticiasser.pe/informe/los-conflictos-mineros-en-paruro-y-chumbivilcas