Astrid Sánchez Jiménez
La prensa costarricense nacional, no ha informado de esta huelga de hambre, algunos medios dedican valiosos minutos a reportajes irrelevantes como la comida de frijol con chicharrón que se dieron los que llegaron a un centro comercial. Es de suponer que la millonaria campaña de la empresa minera abogando por una «minería verde», les impuso el cerco mediático.
Señora presidenta
Licda. Laura Chinchilla
Su despacho
ASUNTO: Carta de una persona que asistió en la huelga de hambre y se retiró el sábado 16 de octubre
El sábado 16 de octubre, tras haber trascurrido el octavo día de ayuno y después de haber permanecido más de 192 horas si ingerir ninguna clase de alimento sólido (más que agua con electrolitos); por recomendación médica del Dr. Rodrigo Cabezas, se me ha sugerido la salida del ayuno. Una baja considerable en la presión sanguínea, es la principal razón clínica. Después de un difícil debate interno y de otro establecido con algunos de mis compañeros y familiares, he tomado la difícil decisión de retirarme físicamente de la Huelga de Hambre por la Vida.
Los Ayunantes por la Vida (así llamados por las cientos de personas que se han acercado a apoyar cada día desde que inició el movimiento, el pasado viernes 08 de octubre frente a Casa Presidencial) hemos elegido el mecanismo de la no-violencia para manifestarle a usted la preocupación de todo un país. Como costarricenses, nos encontramos sumamente inquietos ante la amenaza que ha representado la actividad minera en el mundo: nos conmueve profundamente el dramático rescate y los impactantes daños físicos-psicológicos de más de 30 trabajadores atrapados en la Mina en Chile; así como las decenas de accidentes graves relacionados con la industria minera ocurridos sólo en lo que va de este año.
Se suma a nuestra intranquilidad, una de las mayores catástrofes ecológicas de la historia acontecida en este preciso mes, donde una mina de alúmina en Hungría, mediante un deslizamiento de toneladas de material arrasó con poblados enteros, produjo al menos cuatro muertes, y provocó el ingreso de metales altamente tóxicos en los afluentes del Danubio.
En esta ocasión me quiero dirigir a usted para decirle que los dolores de cabeza, de estómago, de cuerpo y la debilidad, son algunos de los síntomas que se van experimentando exponencialmente conforme pasan los días sin comer. Pero me parece oportuno hacerle saber también que a pesar del dolor que trae consigo el hambre, hemos decidido ser parte de esta acción pacífica, ya que creemos en este método como herramienta para el desarrollo de este país, y consideramos que el dolor que enfrentarán tanto nuestra Tierra así como nuestros hermanos san carleños, con la actividad minera, será aún más grande.
Un grupo de ciudadanos ticos de variadas edades (algunas que incluso sobrepasan los 60 años), hemos iniciado un período de Ayuno Indefinido frente a Casa Presidencial: su casa, desde las 4:00 pm del viernes 08 de octubre, para apoyarla a usted en su responsabilidad política y moral de derogar el decreto 34801 MINAET que declara de Interés Público y Conveniencia Nacional el Proyecto minero Crucitas.
En la presente le pido entre otras cosas, que por respeto al pueblo costarricense y a las y a los compañeros que aún se mantienen en la Huelga de Hambre (declarada con este nombre a partir de cumplir una semana sin recibir respuesta), no siga demostrando un aparente desconocimiento de las funciones que le competen al Poder Ejecutivo y las que le corresponden al Poder Judicial.
Es bien sabido, tanto por usted como por el pueblo costarricense, que el Poder Ejecutivo tiene la potestad de derogar el mencionado decreto, independientemente del proceso legal que se desarrolla en el Tribunal Contencioso Administrativo y cuya resolución es competencia del Poder Judicial. De igual forma que la ley Forestal permite la corta de árboles en terrenos cubiertos de bosque, cuando un proyecto es declarado de Conveniencia Nacional, pero que esta condición puede determinarse con los instrumentos apropiados única y exclusivamente cuando se demuestra que los beneficios sociales son mayores a los costos socio ambientales.
Evidentemente con la minería en Crucitas, un proyecto cortoplacista de 10 años, que sólo dejará terrenos áridos no aptos para la agricultura o el turismo (actividades potenciales para la zona), y donde los riesgos de contaminación de los acuíferos nacionales y nicaragüenses con materiales tóxicos como el cianuro son tal altos; los costos socio ambientales son aún mucho mayores (según lo expresa el Consejo Universitario de la Universidad de Costa Rica).
Y así como el ex-presidente Óscar Arias sin los instrumentos técnicos apropiados, declaró este proyecto minero de Interés Público y Conveniencia Nacional; en contraparte la presidencia de este gobierno que usted preside, ha comunicado públicamente que la minería metálica a cielo abierto no es la actividad económica que se necesita para el desarrollo de este país, de manera tal que sobre la base de estas declaraciones, de forma sencilla y contundente, el día de hoy usted puede tomar la decisión de derogarlo.
No permita que peligrosamente el tiempo siga pasando y que nuestros compañeros expongan cada día más su salud y su vida. Cada hora transcurrida por un ciudadano en condiciones normales, equivale a dos horas de un ayunante. Cada minuto que pasa en este proceso es sumamente valioso, cada segundo que acontece frente a Casa Presidencial es la suma de una cuenta regresiva.
Confiamos en que usted valide el mecanismo de la manifestación pacífica, como la forma en que los ticos les expresamos a ustedes gobernantes, nuestras preocupaciones. En caso contrario usted estaría diciéndole al país que la violencia es la forma de resolver los conflictos. Particularmente, le pido respeto por la integridad de los compañeros Rosibel Porras, David Rojas y Andrés Guillén, quienes aún después de 10 días en huelga de hambre se mantienen a la espera de su intervención.
Más del 90% de la población costarricense no quiere minería en este país y así se lo pide, yo personalmente de forma respetuosa le solicito que no responda con violencia al ignorar a estos ciudadanos, ya que ellos se han acercado digna y pacíficamente en búsqueda de una resolución firme y honesta de parte suya.
Estoy segura que su sensibilidad y vocación política no le permitirá ignorar a estos costarricenses, ni a la voluntad de este pueblo. Cuando usted tome unos minutos de su vida para atender a nuestros compañeros y para derogar este vergonzoso decreto, el pueblo entero se levantará, y le aplaudirá.
Apelando a su buen criterio me despido y le recuerdo partir del momento en que usted se pronuncie a favor de la vida, su labor como presidenta quedará grabada en la memoria de los ticos.
Astrid Sánchez Jiménez, San José, Costa Rica, 18 de octubre 2010.
Ayunante por la vida. Cédula 1-1256-0859