Cerca de 150 personas se reunieron en la zona conocida como El Resbalón, en la vía que conduce de Boyacá a los Llanos, preocupados por la situación hídrica que enfrenta la región y que ya comenzó a afectarlos.
La razón detrás del plantón, es la utilización de grandes cantidades del vital líquido por parte de las mineras que operan en el departamento. Por cuenta del intenso verano el agua escasea más que en otros tiempos y los protestantes pelean porque que el uso sea para el consumo humano y animal y no para la industria.
Según Mauricio Fajardo, presidente de la Junta de Acción Comunal del sector de Los Límites, de la vereda El Pedregal (Boyacá), presente en la protesta, pasaron de tener agua todos los días a tener solo tres días a la semana.
“El tema es muy delicado. Las minas de carbón y especialmente las que extraen roca fosfórica tienen dos motobombas encendidas todo el día sacando agua, mientras que nosotros la necesitamos para sobrevivir. El Gobierno concesionó estas minas en el sector donde hace 40 años hicimos nuestro acueducto y el impacto es insostenible”, sostuvo Fajardo, líder comunitario de 39 años que junto a otros pelea contra la minería en Boyacá y hace poco lograron detener la exploración sísmica en esta región.
Fajardo aseguró también que la minería ha afectado las tuberías del acueducto veredal y los nacimientos de agua de este sector. Esta situación, afirma, ha sido puesta en conocimiento de la autoridad ambiental del departamento, Corpoboyacá, sin que se haya hecho nada para cambiarla.
Para Aida Abella, líder política de la Unión Patriótica y oriunda de Sogamozo (Boyacá), presente también en la protesta, el problema de la explotación minera no solo vulnera el derecho al agua de esta población sino que viene afectando a todo el departamento de Boyacá.
Por su parte, la Corporación Autónoma Regional de Boyacá, Corpoboyacá, ha hecho público que el problema de agua es producto del fenómeno de El Niño, que ha generado en la zona central del departamento temperaturas altas que no son frecuentes en esta región y escasas lluvias desde septiembre de 2015.