Alrededor de 600 integrantes de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes de la 28 de Octubre, el Frente Poblano en Contra del Autoritarismo y del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y Agua marcharon este martes en memoria de los caídos del «Halconazo» del 71 y contra proyectos mineros, hidroeléctrico y el Gasoducto Morelos.
La marcha partió de la Fuente de los Frailes hacia el zócalo de la ciudad de Puebla donde el contingente integrado por vendedores ambulantes, activistas e indígenas exigió con consignas y pancartas: «libertad a los presos políticos» y la presentación con vida de los detenidos y desaparecidos por oponerse a la explotación de recursos naturales.
Los manifestantes pidieron el esclarecimiento de la muerte del líder indígena de Cuetzalan, Antonio Esteban Cruz, que aseguran, está ligada a su activismo contra los llamados «los proyectos de muerte».
Los manifestantes recorrieron toda la avenida Juárez y en el trayecto pidieron además el alto a las reformas estructurales, principalmente a la reforma educativa.
Un contingente de maestros ligados al Consejo Democrático Magisterial Poblano exigió la defensa de la educación pública y gratuita y la no privatización de las escuelas.
Con altavoces pidieron que no se vuelvan a repetir actos como la masacre del jueves de Corpus ocurrida en la Ciudad de México, el 10 de junio de 1971, cuando una manifestación estudiantil en apoyo a los estudiantes de Monterrey, fue violentamente reprimida por un grupo paramilitar al servicio del estado llamado «Los Halcones».
En Puebla, el gobierno no debe permitir que se desarrollen mineras, hidroeléctricas, ni gasoductos que atenten contra la vida, proclamaron diversos oradores durante su recorrido por las calles de la entidad.