Organizaciones de la zona aledaña al polémico proyecto binacional de Barrick Gold recibieron “con gran alegría y satisfacción esta nueva muestra de comprensión de las autoridades judiciales de la inviabilidad de la megaminería química en los ecosistemas glaciares y periglaciares”.
Luego de que el pasado lunes, la Corte de Apelaciones de Copiapó ratificara a través de un fallo la paralización de las obras de Pascua Lama, dando señales de la urgencia de revocar el permiso ambiental de este proyecto, las comunidades y organizaciones que por más de 10 años han sostenido la defensa del Valle del Huasco y de los ecosistemas glaciares de la alta cordillera, aplaudieron la decisión.
A través de una declaración pública la organizaciones Asamblea por el Agua del Huasco Alto; Comité Ecológico y Cultural Esperanza de Vida; Comunidad Diaguita Patay Co; Consejo de Defensa del Valle del Huasco; Pastoral Salvaguarda de la Creación; Comisión Agua y Vida; Iglesia Evangélica Presbiteriana (Chigüinto); Unidos por el Agua (Conay); Pajareteros Alto del Carmen, junto al Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales, OLCA detallaron los alcances de la decisión.
1. Recibimos con gran alegría y satisfacción esta nueva muestra de comprensión de las autoridades judiciales de la inviabilidad de la megaminería química en los ecosistemas glaciares y periglaciares.
2. Entendemos que Pascua Lama es el proyecto minero más fiscalizado de la historia de nuestro país y más resistido por las comunidades, y no obstante ello, de todas formas la empresa Barrick Gold ha hecho por más de 10 años lo que ha querido; ha contaminado las aguas, destruido varios glaciares y dañado irreparablemente otros, ha interferido gravemente el ecosistema en la alta cordillera, ha comprometido la vida de más de 70 personas y ha impactado irreversiblemente nuestras relaciones comunitarias. Sin duda esto da cuenta de la fragilidad de la institucionalidad ambiental y de una institucionalidad minera hecha a medida de las empresas transnacionales y no de los intereses y los planes de desarrollo de nuestro país.
3. Nos parece muy necesario saludar a todas aquellas voluntades que contra el escepticismo y la resignación, han seguido proclamando que Pascua Lama no es viable, y han logrado, con su convicción y la solidez de sus argumentos, convocar nuevas voluntades y hacer prevalecer el apego a la vida por sobre los intereses económicos.
4. Estamos confiadas y confiados en que las diversas acciones que se han desplegado contra el primer proyecto minero binacional del planeta, de las que este recurso de protección es parte, conducirán al retiro del proyecto de nuestra alta cordillera y a la revisión del Tratado Binacional Minero, que es el verdadero responsable de que nuestras comunidades agrícolas sufran la imposición de la megaminería.
5. El Valle del Huasco no quiere ser territorio experimental de la minería transnacional contaminante y destructivo, ni zona de sacrificio del centralismo nacional, lo venimos diciendo contra viento y marea por más de 10 años y exigimos que se escuche nuestra voz, en virtud del derecho a la autodeterminación y al desarrollo. Para nosotros y nosotras desarrollo es poner nuestras capacidades al servicio de la vida, y a la luz de los hechos, eso no es posible con proyectos como Pascua Lama.
6. Agradecemos a las personas, medios de comunicación y organizaciones que han mantenido permanentemente la voz de las comunidades en el tapete, pues indudablemente eso ayuda a legitimar nuestra lucha, a no desviar sus objetivos y a restituir el tejido social fuertemente debilitado por la embestida de la megaminería en nuestro territorio. Por el agua y la vida, esperamos que lo sigan haciendo hasta lograr el cierre definitivo de este y los otros proyectos que amenazan la vida del Valle del Huasco.