El distrito de Cañazas, provincia de Veraguas, Panamá, fue el escenario para que campesinos/as expusieran sus denuncias sobre las secuelas que trajo la minería de Santa Rosa de capital canadiense en la década de los noventas.
Este espacio público realizado el domingo 19 del presente, consistía en un foro público convocado por la empresa Veragold Corporation para determinar la factibilidad de los Estudios de Impacto Ambiental y las bondades que esta actividad puede traer a los pobladores.
Si embargo, la triste historia de la explotación minera en la década de los 90, aun están fresca por los daños y consecuencias que trajo a trabajadores y comunidades. Desde contaminación, falta de seguridad, destrucción ambiental violaciones a derechos laborales, la poca distribución de los bienes generados de la exportación de minerales y una falsa cultura del desarrollo son algunas de las característica de esta falacias al mejoramiento de los pueblos.
Por ende, campesinos/as, salieron al paso a rechazar el proyecto Desarrollo Cañazas, que pretende extraer minerales en el corregimiento de Cañazas y San Marcelo. Y no se descartan acciones legales y movilizaciones para que las autoridades nacionales cumplan con las normas ambientales y las decisiones de las comunidades.