Mexico

De mineros a agroempresarios de éxito

La organización quiere promover proyectos productivos, mostrarles a los mineros que pueden producir nopales, chiles o alimentos derivados de la ganadería

La organización Pensamiento Creativo, Empresarialidad y Desarrollo, especializada en capacitación, con el apoyo del fundador de Grupo Bimbo, Lorenzo Servitje, arrancó un programa piloto que busca transformar a los mineros de Coahuila, que trabajan en las peligrosas minas de carbón, conocidos como «pocitos», en creadores de empresas agroalimentarias.

La intención del programa es ofrecer a los mineros capacitación para desarrollar habilidades empresariales, a fin de que paulatinamente abandonen su trabajo en los «pocitos», que son minas verticales de carbón, sumamente rudimentarias e inseguras, debido a que los gases que se generan en su operación son altamente contaminantes y explosivos, lo que pone en constante riesgo la vida de los trabajadores.

El programa piloto de la organización arrancó con apenas una decena de mineros activos, jubilados e incapacitados, que voluntariamente decidieron dejar de depender de su trabajo en los «pocitos», para desarrollar proyectos productivos, vinculados principalmente con la producción de diferentes variedades de chile, lo que detonará en su reconversión en empresarios comercializadores de estos productos.

«La participación Lorenzo Servitje es estratégica, pues aporta su visión, al ser un empresario que se ha dedicado a respaldar muchas empresas. Con él dialogamos sobre las rutas más apropiadas, para posteriormente definir cómo nos apoyará económicamente», explicó Óscar Tenopala, presidente de la organización.

Detalló que hace apenas un par de meses comenzaron a acercarse a los mineros para plantearles la posibilidad de recibir capacitación para ayudarlos a desarrollar proyectos productivos, vinculados con el agro.

«Comenzamos con un grupo pequeño de alrededor de 10 personas, con las que buscamos que descubran las opciones que tienen, queremos promover proyectos productivos, mostrarles que pueden producir nopales, chiles o alimentos derivados de la ganadería de cabras y ovejas e incluso actividades de ecoturismo, lo primero es que ellos tomen el reto y de den cuenta que hay alternativas», dijo.

Explicó que en la actualidad en la región carbonífera existen entre cinco y seis generaciones de familias donde todos los pobladores se dedican al trabajo en las minas de pozo, cuando la zona ofrece alternativas para desarrollar otras actividades como la siembra de diferentes variedades de chiles, en las que México es deficitario.