Son ya 32 millones 573 mil hectaėreas, el 16.58% del territorio nacional concesionado por el gobierno federal a 2,611 corporaciones mineras, principalmente transnacionales que usufructuėan maės de 27 mil concesiones mineras para explotar todo tipo de minerales metaėlicos y no metaėlicos. La riqueza es privada. A cambio, queda en el paiės maės pobreza, arrasamiento y despojo de los recursos naturales.
32.5 millones de ha concesionadas
El territorio nacional concesionado a empresas mineras para la extraccioėn de metales y minerales del subsuelo aumentoė 53 por ciento en cinco anÞos y medio del gobierno de Felipe Calderoėn, al pasar de 21 millones 248 mil hectaėreas en 2007 a 32 millones 573 mil hectaėreas hasta junio de 2012, de acuerdo con estadiėsticas de la Secretariėa de Economiėa (SE) (Gonzaėlez S., en La Jornada, p.3, 3 sep 2012).
Son 11 millones 325 mil hectaėreas que el gobierno calderonista otorgoė a companÞiėas nacionales y extranjeras para explotar el subsuelo, cantidad que supera en 20 por ciento la superficie total de Oaxaca, el quinto estado del paiės en extensioėn, con 9 millones 395.2 mil hectaėreas.
Ademaės, las cifras contenidas en el sexto Informe de gobierno de Calderoėn revelan que maės de la tercera parte del total del territorio
concesionado en ese periodo se otorgoė en el primer semestre de este anÞo.
Apuro en concesionar y ceder
Es decir, a punto de concluir el sexenio, las autoridades salientes concesionaron a la industria minera 4 millones de hectaėreas en la primera mitad de 2012, a traveės de mil 343 tiėtulos nuevos, lo que implica un disparo de 322 por ciento respecto a la superficie que en conjunto se cedioė al sector en el mismo lapso del anÞo pasado, y de 187 por ciento en cuanto a los tiėtulos.
El informe presidencial destaca la rapidez y eficiencia que han alcanzado las autoridades en los traėmites mineros, al senÞalar que durante el periodo enero-junio de 2012 se emplearon 15.8 diėas para darles resolucioėn, lo que significoė una disminucioėn de 6.5 por ciento en el tiempo promedio para la expedicioėn de concesiones respecto al mismo periodo de 2011. Cabe destacar que 85.3 por ciento de las concesiones tituladas ingresadas fueron expedidas en tiempo. En 2008, el gobierno tardaba 30 diėas en promedio para otorgar una concesioėn minera, el doble de tiempo que hoy demora en hacerlo.
Cuantiosas inversiones para la ganancia privada
No obstante, ninguna cifra del sector minero es destacada tanto por las autoridades en el informe presidencial como por la inversioėn privada: entre enero y agosto de 2012 llegoė a 5 mil 98 millones de doėlares, lo que implica un incremento de 136 por ciento en comparacioėn con los 2 mil 156 millones de do ėlares captados durante los 12 meses de 2007.
Hay maės: el gobierno federal calcula que al finalizar 2012 los capitales privados en el sector llegaraėn a 7 mil 647 millones de doėlares, es decir, 3.5 veces maės de lo captado en el primer anÞo del sexenio.
Concesionado el 16.58% del territorio
Comparativamente, los 32 millones 573 mil hectaėreas que hasta junio estaban bajo explotacioėn de empresas mineras, por concesiones tanto del gobierno actual como de sus antecesores, equivalen a 16.58 por ciento del territorio nacional. Esa superficie super a los territorios de Chihuahua y Chiapas, el primero y octavo estados del paiės en extensioėn, con 32 millones 214 mil hectaėreas en conjunto.
2,611 corporaciones mineras
En cuanto al nuėmero de sociedades inscritas en el registro puėblico de mineriėa, las estadiėsticas del informe presidencial indican que aumentaron 48.7 por ciento. Cuando empezoė el sexenio existiėan uėnicamente mil 755 empresas, de las cuales 66 por ciento eran nacionales y 44 por ciento contaban con participacioėn extranjera. Para la primera mitad de 2012 estaban registradas 2 mil 611 companÞiėas; la mayoriėa la conservaban las nacionales, co n 48.5 por ciento, y el restante 41.5 por ciento contaban con capitales foraėneos.
Los tiėtulos de concesioėn no crecieron al mismo ritmo que el terreno concesionado y las empresas mineras, ya que el incremento soėlo fue de 11.5 por ciento. En 2007 hubo 24 mil 398 tiėtulos y en junio pasado se contabilizaron 27 mil 210.
Porcentualmente el empleo tuvo un desempenÞo similar al crecimiento de los tiėtulos de concesioėn durante este gobierno, ya que el nuėmero de puestos de trabajo subioė 12.7 por ciento, al pasar de 292 mil 993 empleos a 330 mil 240, es decir 37 mil 242 nuevos trabajos, seguėn cifras oficiales.
Poliėtica mineralėrgica antinacional
Lo senÞalado en el uėltimo informe de Calderoėn es muy grave, resultado de la secular poliėtica entreguista seguida en maės de 500 anÞos con todo tipo de minerales. La situacioėn es tan seria que no existe ninguėn control oficial sobre los invasores. La secretariėa de economiėa, encargada de otorgar las concesiones ni siquiera puede visitar las minas, la Auditoria Superior de la Federal no puede ni inspeccionarlas. El territorio concesionado es territorio perdido. Las corporaciones transnacionales lo regresaraėn en forma de craėteres lunares, luego de haber arrasado las tierras, las aguas, los bosques y el viento, y de haber saqueado a la nacioėn con cuantiosas ganancias.
Como siempre ocurre, la riqueza se va y la pobreza se queda. Para el FTE de Meėxico es evidente que la poliėtica del gobierno en este sector es antinacional. Frente a semejante atraco, es necesaria una poliėtica mineraluėrgica independiente que incluya la nacionalizacioėn de esta industria.