EFE, Pekín,
Viernes 18 de septiembre de 2009
Centenares de residentes de la localidad de Jiaoyang (provincia oriental de Fujian) se manifestaron hoy frente a la sede del Gobierno local para protestar contra otro caso de envenenamiento con plomo a niños de la zona, según informó la agencia oficial Xinhua.
Los manifestantes salieron a la calle después de que análisis clínicos practicados a cuatro menores de la ciudad arrojaran niveles excesivos de plomo en sangre. La población acusó a la industrial local Huaqiang Battery Factory, dedicada a la fabricación de pilas y baterías energéticas, de la contaminación con plomo. La agencia china afirmó que "oficiales de los gobiernos locales y del distrito fueron a la ciudad para hablar con los residentes, aunque las dos partes no consiguieron llegar a un acuerdo".Los manifestantes reclamaban el cierre de la fábrica, la realización de tests médicos a toda la población y compensaciones económicas para los afectados.
Según comunicó Radio Free Asia (RFA), la población de Jiaoyang pagó de su propio bolsillo las pruebas médicas para 71 niños ante las sospechas.Los análisis indicaron que en el 94 por ciento de los casos los niveles de plomo eran "relativamente altos para un adulto" y en el 11 por ciento estaban "por encima de los límites de seguridad".
Hoy, jueves, cerca de 280 alumnos de educación infantil y primaria de Jiaoyang no acudieron a las aulas, según confirmó el director del centro escolar, Zou Chaolin.Xinhua informó que las autoridades locales mandaron investigar la planta acusada de causar el envenenamiento, aunque no dio más datos al respecto.
En la misma provincia de Fujian, a principios de mes, cerca de 10.000 personas protagonizaron violentos enfrentamientos con la policía en una protesta contra una planta de residuos en la ciudad de Quanzhou, acusada de haber contaminado el suministro de agua de y aumentar el número de casos de cáncer.
El rápido desarrollo económico de China ha ido acompañado de laxitud de las autoridades hacia la contaminación de muchas industrias, lo que ha causado problemas de salud pública y manifestaciones exigiendo el cierre de algunas factorías.