Perú

Contaminación de La Oroya se extiende hasta La Concepción

Un estudio revela que los habitantes poseen en la sangre niveles de metales superiores a los permitidos por la OMS

La contaminación generada en la ciudad metalúrgica de La Oroya es tal, que ya se ha extendido hasta la provincia de La Concepción, ubicada a 120 kilómetros de distancia, en pleno corazón del valle del Mantaro.

Así lo determinaron estudios realizados por expertos estadounidenses a iniciativa del Arzobispado de Huancayo con la ayuda de Cáritas de Alemania y el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos de América.

El estudio, dirigido por el médico Fernando Serrano, de la División de Salud Ambiental de la Saint Louis University (Missouri), contempló la toma de muestras de sangre y orina de 112 pobladores de La Concepción. En la provincia, además, se recogieron muestras de agua, polvo y aire. Las muestras biológicas (sangre y orina) analizadas en los laboratorios del Centro de Prevención y Control de Enfermedades de Atlanta determinaron que los pobladores de La Concepción tienen en la sangre altos niveles de contaminación por metales pesados, cuyos índices superan los niveles permitidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y los estándares establecidos en Estados Unidos.

Los porcentajes de plomo en la sangre son particularmente altos en un grupo de muestras extraídas a menores de seis meses a 6 años de edad. El 20% de los infantes evaluados supera el límite permitido de más de 10 microgramos de plomo por decilitro de sangre. Mientras tanto, los niveles de cadmio en la sangre de la población examinada formada por mayores de 18 años llegan hasta 0,622 microgramos por decilitro de sangre, muy por encima del registro de 0,412, que es la media geométrica permitida en Estados Unidos, por ejemplo.

Urge prevención
A partir de resultados como estos, el Consejo Nacional del Ambiente (Conam) estima que la contaminación también ha afectado a los pobladores de otros lugares del valle del Mantaro como Huancayo, Chupaca y Jauja.

Ante esta lamentable situación, el secretario ejecutivo del centro del Conam, Carlos Rojas Marcos, indicó que es necesario que los sectores público y privado se unan para implementar políticas y programas de prevención integral dirigidos a los habitantes de estos lugares, quienes aun viviendo lejos se ven perjudicados por una de las ciudades más contaminadas del mundo.