viernes 18 de julio de 2008
En la madrugada del día jueves 17 de julio, pobladores de la comunidad campesina Santa Ana de Pacoyan bloquearon el ingreso a las instalaciones de la empresa minera Chancadora Centauro, exigiendo que la empresa minera cumpla con los compromisos asumidos con la comunidad.
Cientos de comuneros se movilizaron desde muy temprano para ubicarse frente al puesto de vigilancia portón PB-1, cerrando el ingreso a la mina e impidiendo el acceso de los trabajadores al complejo minero.
A las 10 de la mañana, mientras las madres de familia preparaban el almuerzo en "olla común", llego un gran contingente de efectivos de la Policía Nacional (PNP) quienes arremetieron contra la población, haciendo disparos al aire y lanzando gases lacrimógenos a los manifestantes. Con piedra en mano, los comuneros trataron de defenderse, intentaron impedir que la policía los desaloje del lugar sin tener éxito.
El enfrentamiento entre los comuneros de Pacoyan y la policía, dio como resultado lamentable, 6 comuneros heridos y una niña de un año y nueve meses de edad atropellada durante la trifulca por un vehículo no identificado.
Al promediar las 3 de la tarde, llegaron al Hospital Regional de Pasco Daniel Alcides Carrión las víctimas del enfrentamiento en Pacoyan: Heladio Ereña Ambrosio, Francisco Trujillo Atanasio, Cristian Soto Ramos, Iván Ramos Poma, Evaristo Roque y Mercedes Basilio Cornejo, todos ellos presentaban fuertes contusiones producto del enfrentamiento y síntomas de asfixia provocados por la excesiva inhalación de gases lacrimógenos.
María Rodríguez Callúpe, madre de la pequeña niña atropella (1 año 9 meses) exige que se sancione a los responsables de la agresión a los comuneros y a quien atropello a su bebe.
Según versiones de la madre, el auto que atropello a la niña era de la policía nacional.
Hugo Ermitaño, presidente de la comunidad campesina Santa Ana de Pacoyan, afirmó que su movilización era pacífica y que no había ocurrido ningún acto de violencia hasta que los policías llegaron de manera agresiva, dijo también: "estamos protestando por los constantes atropellos de la empresa minera y el incumplimiento de los compromisos que tiene Centauro con la comunidad.
Hemos solicitado una audiencia con el Gerente General de la mina Centauro y no fuimos atendidos a tiempo, por eso decidimos defender nuestros derechos".
La comunidad exige que la empresa minera no siga contaminando sus territorios y que realice la mitigación de los impactos negativos de la mina en la laguna cercana a Pocoyan que según refieren está contaminada.
También denuncian que la empresa ha usurpado sus territorios sin ninguna autorización.
Raquel Alvares, jefa de la oficina de la Defensoría del Pueblo de Pasco, aseguró que la Fiscalía Provincial ha iniciado un proceso de investigación exhaustivo para determinar los responsables de la agresión a los comuneros en Pacoyan, a su vez, se ha iniciado el proceso de diálogo entre los representantes de la mina Centauro y la comunidad para resolver el conflicto.
"Desde la Defensoría estamos promoviendo el dialogo en los conflictos que se están desarrollando en la región, además, velamos para que las entidades correspondientes cumplan debidamente con las responsabilidades y funciones que le compete", remarco la representante de la Defensoría del Pueblo.
Por otro lado, en las calles del distrito de Simón Bolívar se movilizaban los trabajadores de la empresa minera Chancadora Centauro vociferando ¡Pacoyan déjennos trabajar! ¡Pacoyan queremos trabajar!.
De esta manera exigían el reinicio de sus labores en la mina, que por más de 24 horas estaban paralizadas a causa del conflicto con la comunidad.
Solidaridad con Pacoyan
Comunidades campesinas y organizaciones sociales de Pasco vienen pronunciándose y mostrando su apoyo solidario con la población de Pacoyan, por la agresión que han sufrido al defender sus derechos, así también, piden que la empresa minera Centauro asuma su responsabilidad en la violencia ejercida contra los comuneros.
La Federación Regional de Comunidades Campesinas y Nativas de Pasco (FERECCNPA), la Coordinadora Regional de Comunidades Afectadas por la Minería en Pasco (CORECAMI Pasco), la Comunidad San Antonio de Rancas, entre otras, vienen acompañando a la comunidad de Pacoyan para que no quede impune el maltrato del cual han sido víctimas los comuneros.
Los dirigentes de las diversas organizaciones y comunidades campesinas de la región de Pasco invocan al Gobierno Nacional, Gobierno Regional, Gobiernos Locales, a las autoridades correspondientes y a los funcionarios de las empresas mineras, que asuman una actitud más concertadora y preactiva para prevenir conflictos similares en la región.
"No podemos permitir que se siga vulnerando los derechos la comunidad, por eso las autoridades deben prevenir los conflictos para no estar lamentándonos después. No se puede seguir contaminado nuestros territorios y reprimiendo a las comunidades", enfatizo Rolando Cristóbal Panéz – Secretario de Organización de la FERECCNPA.
Karin Ruth Anchelía Jesusi
karin.anchelia@gmail.com