Internacional

ARSENICO EN EL AGUA, RIESGO PARA 140 MILLONES DE PERSONAS

Miércoles 29 de Agosto, 2007

Por Michael Kahn LONDRES (Reuters) –

La aparición normal de arsénico en agua potable genera un creciente riesgo global para la salud, mientras grandes números de personas consumen sin saberlo niveles poco saludables del elemento químico, dijeron el miércoles investigadores. El problema es mayor de lo que pensaban los científicos y afecta a casi 140 millones de personas en más de 70 países, de acuerdo a una nueva investigación presentada en la reunión anual de la Sociedad Geográfica Real en Londres. El arsénico puede causar enfermedades pulmonares y cáncer, inclusive después de dejar de tomar agua contaminada, dijo Peter Ravenscroft, investigador de la Universidad de Cambridge.

"Lo nuevo es que el nivel de contaminación con arsénico es mucho mayor del que la gente cree," dijo Ravenscroft en una entrevista telefónica.

"Hay una conexión muy importante entre el arsénico en agua y el arsénico en comida, especialmente donde la gente tiene cultivos irrigados," agregó.

Los parámetros de la Organización Mundial de la Salud indican que 10 partes por mil millones de arsénico en suministros de agua es un límite seguro, pero decenas de millones de personas en el mundo toman agua insegura por encima de ese nivel, dijeron los investigadores.

Actualmente, Bangladesh es el país más afectado. Allí existe la probabilidad de que cientos de miles de personas mueran por envenenamiento con arsénico, dijeron los investigadores.
También se ha encontrado arsénico en aguas de países desarrollados y actividades industriales como la minería también pueden provocar la contaminación.

La concientización sobre el tema condujo a más pruebas, que revelaron la presencia generalizada de arsénico en agua potable, pero otros investigadores dijeron que aún se deben hacer más cosas para abordar el problema. "La mayoría de los países tienen algunas fuentes de agua con niveles peligrosos de arsénico, pero recién ahora estamos comenzando a reconocer la magnitud del problema," dijo Allan Smith, investigador de la Universidad de Berkeley, California, y asesor de la OMS sobre el químico, en un comunicado.