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Enero 9, 2007 La Paz, Bolivia —
El Ministro de Minería y Metalurgia, Guillermo Dalence, informó que La Fundidora Vinto, que se encuentra en manos de la trasnacional Glencore, será la próxima empresa en ser nacionalizada después de la solución al conflicto de Huanuni. Dalence, explicó que la fundidora de Vinto debe estar en manos del Estado boliviano y no así en manos de las transnacionales, establecidos en el marco de la nueva política minera que esta implementando el gobierno del presidente, Evo Morarles.
"La Fundidora Vinto, debe estar con los bolivianos, producir y generar ingresos para los bolivianos", manifestó. Para concretar este objetivo, el ministro de Minería Guillermo Dalence, se reunirá con la Asociación de Mineros Medianos este miércoles, para negociar las condiciones en que la fundición de Vinto pasaría a manos de los bolivianos.
En Oruro, los trabajadores del Complejo Metalúrgico han advertido que no permitirán las intenciones del gobierno de nacionalizar esta fundidora, porque temen por su estabilidad económica y social.
Los trabajadores del Complejo Metalúrgico de Vinto, manifestaron que existe el compromiso entre gobierno y mineros, garantizando sus fuentes de trabajo en todas las actividades minero-metalúrgicas así como la inversión privada nacional y extranjera. Estos trabajadores, esperan que el gobierno cumpla con lo prometido y que la Fundidora Vinto regrese al control del estado boliviano, sin condiciones ni arbitrariedades.
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