Perú

Sin respetar derechos, por 4ta vez suspenden juicio oral a 19 campesinos de Las Bambas.

El Primer Juzgado Unipersonal de Cotabambas – Tambobamba, de la Corte Superior de Justicia de Apurímac, había programado para el día de hoy la continuación de la Audiencia del Juicio Oral, contra 19 campesinos perteneciente a comunidades afectadas por el proyecto minero Las Bambas. Sin embargo, el nuevo Juez designado para el proceso consideró que no se podía continuar con la Audiencia, básicamente, porque fue nombrado la semana pasada y no había estado desde el inicio del Juicio Oral.

Antecedentes

Al respecto, como ya es de conocimiento público los hechos, materia de este proceso, corresponden al 25 de septiembre del 2015, fecha en la que las comunidades de las provincias Grau y Cotabambas de la Región Apurímac, iniciaron un paro indefinido, al no haber sido informados ni consultados sobre las modificaciones realizadas al Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto minero las Bambas exigiendo, además, que la empresa minera cumpla con los compromisos asumidos con sus comunidades. Llegando esta situación a su punto más álgido el 28 de septiembre, cuando la represión policial produjo la muerte de 3 comuneros.

El Juzgado

Con relación a lo resuelto por el juzgado, consideramos que se trata de una decisión equivocada, porque si esa era su criterio debió de resolver con antelación el quiebre del proceso y no esperar que los 19 comuneros asistan a la Audiencia el día de hoy. Ello debido a que la mayoría de los comuneros, sino todos, son de escasos recursos económicos y, en muchos casos, se trasladan a pie, durante varias horas, desde sus comunidades que están muy alejadas de la ciudad de Tambobamba en la que se encuentra la sede del Juzgado.

Si bien en el modelo procesal penal aplicable al caso se prioriza la oralidad, el nuevo magistrado debió de actuar con un criterio qué sin vulnerar la norma procesal, importe mayor consideración a los comuneros procesados que después de trasladarse a pie por varias horas llegan a una Audiencia que en realidad sólo dura unos minutos. Además, el juzgado debió tener en cuenta que esta era la cuarta vez que, en la práctica, se suspendía el Juicio Oral en el cual venían siendo procesados (una vez se suspendió por falta de notificación del juzgado y dos veces por responsabilidad de la fiscalía).

Posición de FEDEPAZ (integrante de Red Muqui)

FEDEPAZ, que asume la defensa legal de una parte de los campesinos procesados, considera que esta conducta del nuevo magistrado llamado Exaltación Chicana importa la vulneración del derecho a ser juzgado dentro de un plazo razonable (cuarta vez desde marzo que se había citado a juicio oral y éste se suspendía prácticamente sin ningún avance sustancial) que tiene toda persona procesada como el caso de los aquí referidos 19 campesinos.

En atención a ello, FEDEPAZ exige al Juzgado Unipersonal de Cotabambas – Tambobamba que tenga presente el gran esfuerzo que realizan los comuneros procesados para asistir puntualmente a las audiencias y el derecho de los mismos a ser procesados dentro de un plazo razonable, evitando suspensiones innecesarias de las Audiencias con la expedición de resoluciones justas y oportunas para no vulnerar el debido proceso y los derechos fundamentales de los campesinos antes referidos.

Nota elaborada por el Área de Prensa

Fundación Ecuménica para el Desarrollo y la Paz – FEDEPAZ

Perú

Tía María: cálculo e indecisión gubernamental

La situación actual alrededor del proyecto Tía María de la empresa Southern Perú vuelve a exhibir la incapacidad habitual del gobierno para gestionar los conflictos sociales y de paso, nos recuerda que la inacción es el camino más transitado por el presidente Martín Vizcarra para evadir aquellos problemas, cuya solución exigen una postura política firme.

Por otro lado, todo indica que las tensiones al interior del Poder Ejecutivo se irán incrementando entre aquellos que como el Ministro de Economía y Finanzas, apuestan decididamente por el otorgamiento de la autorización a la empresa Southern Perú buscando enviar una señal favorable a los grandes inversionistas privados, y el grupo asesor más cercano al presidente Vizcarra que busca evitar a toda costa que el conflicto afecte la popularidad presidencial. El problema es que para ambos grupos lo relevante es el interés político de corto plazo y no la construcción de un consenso mínimo que otorgue legitimidad a las decisiones gubernamentales. En cualquier caso, el desenlace podría traer aparejado el recambio en algunas ya deslucidas carteras ministeriales.

En este escenario signado por la incertudumbre, las posturas del sector minero y de las organizaciones que se oponen al proyecto Tía María tienden a profundizar la confrontación como mecanismo de presión contra un gobierno debilitado y carente de iniciativa política. Es por ello que propuestas como la constitución de una mesa de negociación no son vistas como alternativa y, por el contrario, cualquier predisposición al diálogo es vista como una actitud frágil y concesiva.

En Noticias SER creemos que mientras el gobierno persista en asumir que su principal rol es administrar el statu quo y maquillar su falta de decisión, los conflictos sociales seguirán multiplicándose, las mesas de diálogo no hallarán solución alguna, y lo único que se logrará es profundizar la enorme desconfianza que la ciudadanía siente hacia el Estado.

Fuente:http://www.noticiasser.pe/index.php/opinion/tia-maria-calculo-e-indecision-gubernamental

Perú

José De Echave: La CONFIEP está jugando su partido y está presionando abiertamente al gobierno.

La situación en el Valle del Tambo (Islay, Arequipa) vuelve a estar en la agenda nacional, porque en estas últimas semanas, los pobladores de la zona han manifestado su oposición al desarrollo del proyecto minero Tía María, por los impactos que generaría en la zona. Del otro lado, se tiene a los gremios empresariales presionando al gobierno para que el MINEM otorgue la licencia de construcción a Shouthern Perú para iniciar el proyecto antes de que el Estudio de Impacto Ambiental pierda vigencia. El gobierno de Martín Vizcarra se encuentra en una encrucijada y su decisión podría desencadenar un nuevo conflicto en el país. Para conversar sobre este escenario complicado, Noticias SER entrevistó a José De Echave Investigador de Cooperaccion.

 

¿Cómo interpretar el mensaje de las organizaciones del Valle de Tambo que indican que el Presidente de la Republica debería ir a la zona, pero no para dialogar, sino a escuchar a la población sobre sus razones para estar en contra del proyecto Tía María?

Creo que es clave que el Presidente de la República y el Presidente del Consejo de Ministros puedan escuchar la posición de los pobladores del Valle del Tambo. Se necesita ese escenario de conversación, de diálogo, pero me da la impresión a todas luces que va ser bien difícil que se pueda concretar el proyecto Tía María, porque la población, los agricultores del valle lo perciben como una amenaza a su principal actividad económica que es la agricultura.

¿Considera que la situación que actualmente se vive en el Valle del Tambo era algo previsible?

Lo primero que hay que decir del caso de Tía María es que de todos los conflictos que ha habido en el país, en los últimos 20 años, es el más predecible y que posee mayores antecedentes. No hay que olvidar que es el tercer capítulo de este conflicto. El primero fue entre 2009 y 2011, durante el gobierno de García, donde hubo  mucha  resistencia y tensión social, así como enfrentamientos, pero al mismo tiempo hubo una revisión del Estudio del Impacto Ambiental (EIA) por un organismo de Naciones Unidas, que literalmente lo destrozo porque hubo 137 observaciones y  la propia empresa no se animó a presentar ese estudio, y lo tuvo que botar al tacho. Luego tuvimos un segundo capítulo en el gobierno de Humala, donde el 1 de agosto del 2014 se aprobó el EIA, con una nueva situación de tensión social y enfrentamientos. Tía María nos ha costado casi 10 personas fallecidas, decenas de personas heridas y procesos judiciales en marcha. Ahora se está abriendo un tercer capítulo porque se vence la vigencia del EIA y la empresa demanda que el gobierno apruebe la licencia de construcción.

El Ministro de Economía dijo que existen condiciones para entregar la licencia de construcción al proyecto Tía María, pero que el inicio del proyecto se podría demorar hasta que haya licencia social, ¿considera que esto exacerbaría los ánimos de los pobladores del Valle del Tambo?

Me da la impresión que el Ejecutivo tiene un dilema, en particular el Ministro de Economía. Existen formalidades, procesos administrativos, y un marco legal que el Estado está en la obligación de respetar para evitar que Southern Perú plantee un proceso de arbitraje. Hay la formalidad de la licencia de construcción, pero el otro tema es que esa decisión provoque un estallido social. Las declaraciones del Ministro de Economía y del Presidente de la República, expresan esa encrucijada en la cual se están.

En ese dilema ¿es altamente probable que por presiones de gremios empresariales el gobierno termine cediendo a los intereses del proyecto minero?

Sin duda alguna la CONFIEP está jugando su partido y está presionando abiertamente al gobierno. La presidenta de la CONFIEP ha dado una entrevista, donde señala como punto central la aprobación de Tía  María como si éste fuese un tema exclusivamente  administrativo, y no es así.  A todas luces, el proyecto Tía María tiene un gravísimo problema de licencia social para decirlo en un término que las propias empresas mineras han creado. Las empresas dicen, en sus códigos de conducta que  hoy en día una empresa moderna en pleno siglo XXI necesita licencia social para operar, sin ella ningún proyecto es viable, ese es un mensaje que uno les escucha muchas veces pero que en ocasiones es totalmente contradictorio con las declaraciones de algunos voceros gremiales empresariales.

En el caso concreto de Tía María, ¿es imposible la convivencia entre la actividad minera y la agricultura?

Los agricultores del Valle de Tambo tienen varias preocupaciones: en primer lugar los impactos que podría generar el proyecto por estar muy próximo al Valle del Tambo, pero además saben que hay como 10 empresas que tienen concesiones mineras en la provincia de Islay que podrían intentar explotar. Y a esto hay que agregar un tema complicado y común a todos los valles costeros que es el abastecimiento de agua, son zonas con alto estrés hídrico y por eso es que el rechazo al primer EIA porque planteaba utilizar el agua de la cuenca, el segundo EIA se modificó y se planteó la desalinización del agua de mar.

Desde su perspectiva ¿cuál es la salida que se le puede dar a este conflicto?

Siempre hay que aspirar a que la salida sea dialogada, pacífica, institucional y que el país saque lecciones de este tipo de situaciones. Lo ideal es que haya un mecanismo institucionalizado de diálogo, donde el Estado juegue un rol facilitador y si se llega a la conclusión de que el proyecto no tiene viabilidad social no debería ser desarrollado, porque no le conviene al país. Y en ese caso tampoco le convendría a las empresas mineras en su conjunto imponer un proyecto a la fuerza, ya que sería negativo para la economía del país, para la población del Valle de Tambo, y para la imagen de la minería. No es que los pobladores de Tía María se han vuelto locos para decir que el proyecto no deba desarrollarse, y espero que el sector minero, y en concreto la empresa Southern entienda eso.

Fuente:http://www.noticiasser.pe/entrevista/jose-de-echave-la-confiep-esta-jugando-su-partido-y-esta-presionando-abiertamente-al?fbclid=IwAR1_XrREOcPVz6y7bmWB_4swl9JBTbvm6BWHvs7ONT4rVqfl9-cBehAv7aY

Perú

¿En qué va el litigio constitucional contra la criminalización de la protesta?

Existen diferentes procesos constitucionales contra el andamiaje institucional que promueve la criminalización de la protesta social en el Perú. Se trata de un esfuerzo por cuestionar la constitucionalidad de los diferentes componentes de éste, con la finalidad de que se dejen sin efecto. Sería bueno que los funcionarios del Estado comprendan que la respuesta a estas protestas no debe ser fundamentalmente punitiva, penal y  represiva sino política. Deben diseñar e implementar políticas públicas de protección de los derechos afectados que generan estas protestas.

Presentamos varios casos:

  1. Convenios entre la Policía Nacional y las empresas extractivas

Desde 1994 hasta la fecha se han suscrito alrededor de 150 convenios entre la Policía Nacional del Perú y las empresas extractivas. Producto de éstos, los efectivos policiales les prestan servicios extraordinarios y les prodigan un trato diferenciado y privilegiado, a cambio de una retribución económica. De esta manera los policías se convierten en guardias particulares de intereses corporativos, en menoscabo de sus funciones como servidores públicos que reciben sus sueldos de los impuestos de todos los contribuyentes. En la práctica, estamos ante el fenómeno de la privatización de la función pública policial y del orden interno.

Esta situación expresa un evidente conflicto de interés al interior de la Policía Nacional. Es imposible que los efectivos distingan los intereses públicos de los corporativos. Consideramos que este escenario propicia la criminalización de la protesta social y alienta, además, el uso abusivo de la fuerza policial.

 Acciones legales

En 2015 el exalcalde provincial de Espinar, Óscar Mollohuanca, con el patrocinio de Derechos Humanos sin Fronteras (DHSF) e Instituto de Defensa Legal (IDL), interpuso una demanda de amparo contra el convenio suscrito por la Policía Nacional y la compañía minera Antapaccay, filial de la multinacional Glencore. La demanda ha sido admitida recientemente por el Tribunal Constitucional que se pronunciará sobre el fondo (Exp. No. 04289-2016-PA)

Asimismo, este año se han presentado dos nuevas demandas. Primero, el Colegio de Abogados de San Martín, con el patrocinio legal de IDL y Earthright International, ha presentado una demanda de inconstitucionalidad contra las normas que dan cobertura normativa a estos convenios (exp. No. 00009-2019-PI). En segundo lugar, Víctor Limaypuma, destacado líder campesino, ha presentado una demanda de amparo contra el convenio entre la empresa minera MMG, a cargo del proyecto Las Bambas, y la Policía Nacional del Perú, que viene siendo tramitado ante el Juzgado Mixto de Cotabambas, Apurímac (exp. No. 122-2019).

 

2. Estados de emergencia preventivos

El Estado recurre indiscriminadamente a estados de emergencia para restringir los derechos fundamentales y permitir la intervención policial o militar, sin acreditar la existencia de una grave afectación al orden público, requisito exigido por el artículo 137 de la Constitución. Se trata del uso del poder estatal por fuera del marco de las competencias constitucionales.

El mejor ejemplo es la sistemática prórroga del estado de emergencia en los distritos bajo influencia del proyecto minero Las Bambas. Como se sabe, se decretó el estado de emergencia a lo largo del Corredor Vial Apurímac-Cusco-Arequipa, que tiene 482 km2 de extensión y 500 metros a cada lado de la vía.

En estos lugares se han declarado estados de emergencia de manera preventiva, restringiendo derechos fundamentales tan importantes como la libertad individual, de reunión, de tránsito y la inviolabilidad del domicilio. En los hechos, la población se ve impedida de reunirse a lo largo de la vía. No pueden realizar actos públicos y privados; mucho menos políticos.

Hasta hace poco esta situación se mantuvo en grandes zonas del territorio nacional, tal como se muestra en el siguiente gráfico:

 

Decreto Supremo Fecha de publicación Zona
15-2017-PCM(Declaración) 10/2/2017 Provincia de Cotabambas(Apurímac)
20-2017-PCM(Declaración) 21/2/2017 Distrito de Coporaque(Espinar, Cusco)
85-2017-PCM(Declaración) 16/8/2017 Distritos de Chalhuahuacho, Haquira y Mara(Cotabambas, Apurímac)
93-2017-PCM(Prórroga y declaración) 14/9/2017 Distritos de Chalhuahuacho, Haquira y Mara(Cotabambas, Apurímac)

Distrito de Capacmarca

(Chumbivilcas, Cusco)

101-2017-PCM(Prórroga) 13/10/2017 Distritos de Chalhuahuacho y Mara(Cotabambas, Apurímac)

Distrito de Capacmarca

(Chumbivilcas, Cusco)

107-2017-PCM(Prórroga) 13/11/2017 Distritos de Chalhuahuacho y Mara(Cotabambas, Apurímac)

Distrito de Capacmarca

(Chumbivilcas, Cusco)

6-2018-PCM(Declaración) 11/1/2018 Corredor Vial Apurímac – Cusco – Arequipa
15-2018-PCM(Prórroga) 10/2/2018 Corredor Vial Apurímac – Cusco – Arequipa
25-2018-PCM(Prórroga) 12/3/2018 Corredor Vial Apurímac – Cusco – Arequipa
37-2018-PCM(Prórroga) 11/4/2018 Corredor Vial Apurímac – Cusco – Arequipa

 Elaboración propia

Para mayor información, consúltese:

http://www.justiciaviva.org.pe/new/wp-content/uploads/2017/11/Informe-jur%C3%ADdico.-Inconstitucionalidad-de-los-estados-de-emergencia-preventivos_PPII.pdf

 Acciones legales

Se han iniciado tres procesos judiciales contra el Decreto Supremo N° 037-2018-PCM, que una vez más prorrogó el estado de emergencia a lo largo del corredor vial. Varias organizaciones sociales de Cotabambas (Apurímac) presentaron en 2017 una demanda de hábeas corpus contra la declaratoria del estado de emergencia en Cotabambas, con el patrocinio de la Asociación Pro Derechos Humanos (Aprodeh)  y el IDL. Ésta fue rechazada por el Juzgado de Investigación Preparatoria de Cotabambas y la Sala Penal de Abancay. Actualmente se encuentra en el Tribunal Constitucional (exp. No. 00964-2018-HC).

Una segunda demanda de hábeas corpus fue presentada por diversas organizaciones sociales de Cusco y Apurímac, con el patrocinio legal de Derechos Humanos sin Fronteras (DHSF) e IDL. Esta demanda fue rechazada por el Sexto Juzgado de Investigación Preparatoria de Cusco y la Sala Penal del Cusco. Actualmente se encuentra en el Tribunal Constitucional (exp. No. 02275-2018-HC).

Una tercera demanda de acción popular fue presentada por la presidenta del Consejo Regional de Apurímac, con el patrocinio de IDL, DHSF, Fedepaz, y Aporvidha. Esta fue remitida por la Primera Sala Civil de la Corte Superior de Lima a la Segunda Sala Constitucional de la Corte Superior (exp. 00131-2018), que la declaró improcedente. Sn embargo, el Estado no prorrogó el estado de emergencia. Consideramos que esta decisión estuvo influida por la presión ejercida por las organizaciones locales. La demanda, en ese sentido, cumplió con su función.

 En estos momentos solo la demanda de hábeas corpus en Apurímac se encuentra en el Tribunal Constitucional (exp. No. 00964-2018-HC).

 

3. Legislación que alimenta la criminalización de la protesta social

Existe un conjunto de normas penales y procesal-penales que promueven la penalización de las acciones de protesta de la población, que no tiene otra manera de visibilizar sus reclamos cuando se violan sus derechos. Se crean nuevos delitos, se incrementan las penas existentes o se establecen nuevos supuestos y modalidades agravadas.

Un claro ejemplo de lo dicho es el tercer párrafo del artículo 200 del Código Penal, que tipifica como delito de extorsión la toma de carreteras y locales públicos, e incluye los contextos de protesta social. La pena correspondiente es de cinco a diez años de prisión, y de 15 a 25 años cuando participan más de dos personas.

 Acciones legales

El Colegio de Abogados de Puno, con el patrocinio de IDL, ha presentado una demanda de inconstitucionalidad contra el tercer párrafo del artículo 200 del Código Penal. El caso se encuentra en trámite ante el Tribunal Constitucional. Ya se realizó la vista de la causa y estamos a la espera de la sentencia (exp. No. 00009-2018-AI).

 

4.Persecución penal de los defensores de derechos humanos

El último componente es el de la criminalización de los activistas, líderes sociales y defensores de derechos humanos que tienen un trabajo reconocido en la denuncia de reclamos ciudadanos y reivindicación de derechos. Diversas agencias estatales han iniciado denuncias penales y administrativas contra ellos: se les persigue y se les pone una serie de obstáculos para que no puedan realizar sus labores.

Algunos ejemplos de lo ocurrido son los casos de Bagua, Espinar y Puno, en los que pobladores indígenas fueron procesados por la justicia penal por supuestos delitos cometidos durante actos de protesta, afortunadamente con resultados favorables. Otro caso es el del abogado Juan Carlos Ruiz Molleda y el médico Fernando Osores Plenge, quienes vienen siendo procesados por el Juez Penal Unipersonal de Arequipa, tras una denuncia del Ministerio de Salud por la difusión de un artículo en el que denuncian la crisis de intoxicación por metales pesados en Espinar. El médico Osores Plengue fue también denunciado por otros delitos porque denunció una serie de irregularidades en el Ministerio de Salud.

Igualmente, en febrero de 2017, la activista canadiense Jennifer Moore fue detenida en Cusco por la Policía Nacional luego de que difundiera un documental que cuestionaba las malas prácticas de la empresa minera Hudbay. Moore fue sometida a un procedimiento administrativo en el que se vulneraron todas las garantías: no tuvo derecho a la defensa y se emitió una orden de impedimento de ingreso al país a través de una alerta migratoria.

 

Acciones legales

Se presentó una demanda de hábeas corpus en favor de Moore, ante el Primer Juzgado Penal con Reos Libres de Lima, con el patrocinio de Fedepaz, Aporvidha e IDL, y el apoyo de CooperAcción. La demanda fue rechazada en primera instancia por cuestiones formales. La Cuarta Sala Penal para Procesos con Reos Libres ordenó su admisión a trámite y el proceso se encuentra nuevamente en la primera instancia.

 

Ver nuestro artículo:

http://www.justiciaviva.org.pe/new/criminalizacion-de-la-protesta-socioambiental-y-litigio-estrategico-en-el-peru/

 

Fuente:https://idl.org.pe/en-que-va-el-litigio-constitucional-contra-la-criminalizacion-de-la-protesta/

Mexico

[Artículo] Ixtacamaxtitlán: 60 días de tensión por mina canadiense

La Semarnat tiene dos meses para definir si avala o no la propuesta de mina a cielo abierto para extraer oro y plata en el municipio de Ixtacamaxtitlán, Puebla, realizada por la canadiense Almaden Minerals. Durante el proceso, la empresa ejerce presión en el pueblo

En las playeras amarillas leían “Sí al proyecto Ixtaca”. Era una sesión informativa y pública realizada por la Secretaría de Medio ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en el municipio de Ixtacamaxtitlán. Una minera canadiense, Almaden Minerals, pretende pasar de fase de exploración a la más destructiva: explotación del oro de este pueblo; quienes portaban la playera con esta frase no eran pobladores de la comunidad, si no acarreados llevados por la empresa canadiense desde Veracruz.

El foro público de la Semarnat del 25 de junio se enmarca en el proceso de evaluación de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que entregó la empresa canadiense para poder modificar el permiso que tiene y pasar conseguir pasar a la fase de explotación.

La empresa canadiense entró al municipio el 24 de enero de 2019 con una filial mexicana, Minera Gorrión, directamente a la comunidad más afectada: Santa María Zotoltepec. En febrero entregaron la MIA a la institución federal. Sin embargo, desde 2001 cuenta con oficinas en la zona.

En el documento la empresa anuncia su interés de ocupar 1,044.02 hectáreas de territorio en Ixtacamaxtitlán, donde hay yacimientos de oro y plata en la cuenca alta del río Apulco, y solicita el cambio de uso de suelo de terrenos forestales para extraer mediante una mina a cielo abierto.

Entraron al evento público realizado por Semarnat favoreciendo la opción de la mina y la población se enfureció y lo denunció mediáticamente y a través de organizaciones sociales como Poder Project. La práctica fue evidente, pues contrasta con las asambleas regionales que organizan comunidades Masehual-Totonaku en defensa del Territorio en las que participan.

Semarnat tiene 60 días para devolver la MIA con su decisión, pero en algunos medios de comunicación se ha manejado el dato de 30, y el antecedente que en abril el Juzgado Segundo de Distrito de Puebla emitió una resolución que obliga a la canadiense a realizar una consulta con comunidades. Pobladores, sin embargo denuncian desconocer si esta infiltración es parte de ese requisito.

En la Sierra Norte de Puebla existen 105 concesiones mineras, 72 por ciento son de Almaden Minerals; Ixtacamaxtitlán, San Felipe Tepatlán, Ahuacatlán y Tlapacoya son los municipios más afectados. Desde el 2011 que fue realizado el primer conteo, el número de concesiones mineras se ha triplicado.

 

Los pobladores de la comunidad más cercana a la mina se han opuesto a su operación en distintas ocasiones, han protestado ante Semarnat, en Palacio Nacional, incluso desde el periodo donde sólo estaba explorando. Ahora que la minera tiene intenciones de operar, recabaron información sobre una serie de puntos que esperan les dé la razón para que la Semarnat no les avale la manifestación.

El primer argumento que están planteando es que el proyecto está basado en una serie de concesiones que no existen porque se encuentran en litigio.

El amparo es el mismo que interpuso la comunidad de Tecoltémic desde el 9 de abril del 2015, en el Juzgado Segundo en Materia Civil Distrito de Puebla, el cual les otorgó la suspensión provisional y por ello la Secretaría de Economía suscribió en los títulos de concesión minera que éstos no podían revocarse, transferirse o hacerse ningún acto sobre ellos hasta que no concluyera el juicio.

Diana Pérez, abogada de la organización Tiyat Tlalli, que lleva el caso de la comunidad, explicó cuál es la estrategia de la minera: “quieren intentar reducir el número de concesiones; reducir las concesiones es algo así como partir el pastel en varios pedazos pequeños para después desistirse, decir, ‘bueno, yo no quiero estos pedazos’, pedazos que afectaban a Tecoltémic, ésa fue su estrategia para dejar sin estrategia el juicio”.

En marzo de 2018, un Tribunal Colegiado le volvió a dar la razón a Tecoltémic y le dijo a la Secretaría de Economía que no puede modificar los títulos de concesión que abarcan casi 14 mil hectáreas en el municipio –el 80 por ciento del municipio de Ixtacamaxtitlán– porque eso iría en contra de la sentencia que se dictó en el 2015.

Otro de los argumentos de los pobladores es que se omiten los impactos ambientales que el proyecto minero en la región. A lo que la empresa ha prometido en reiteradas ocasiones que la mina funcionará con agua de lluvia y que no hará uso del agua subterránea.

Alejandro Marreros, de la Unión de Ejidos y Comunidades por la Defensa de la Vida y el Territorio Atcolhua, denuncia que el uso de agua que prevé la mina es desproporcionado con lo que los pobldores utilizan.“Con datos de los ponentes, la conclusión es que no es suficiente llevar a cabo el proyecto minero en tanto que están previendo utilizar cinco millones cuatrocientos mil litros de agua diarios, esta cantidad de agua es el doble de la cantidad de agua que utilizan las 120 comunidades de Ixtacamaxtitlan en su conjunto”, argumenta.

 

Fuente:http://www.otrosmundoschiapas.org/index.php/temas-analisis/32-extractivismo/mineria/3239-articulo-ixtacamaxtitlan-60-dias-de-tension-por-mina-canadiense?fbclid=IwAR2FDn52iSKIGD0FnO6SE901cqfNTM3MiHfQLjOOdTkzbrime1r6OMaKZtU

Perú

Tía María: Southern respira porque el Gobierno le ampliará el plazo del EIA

El próximo 31 de julio se cumplen cinco años desde que el Gobierno recibió el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto cuprífero de Tía María (Arequipa), de manos de Southern Perú, quedando expedito para obtener el permiso de construcción.

Es decir, al cumplir cinco años, ese EIA perdería su vigencia. Por lo tanto, Southern Perú se vería obligada a realizar otro estudio, que le demandaría más dinero y más tiempo.

Sin embargo, una fuente del sector minero señaló a Correo que se ampliaría el plazo de vigencia del EIA de Tía María, con lo que Southern Perú tendrá un gran respiro.

PROCESO

Otra fuente del sector precisó que hacer un EIA no solo implica desembolsar más dinero, sino también demanda tiempo y esfuerzo de la empresa, porque tiene que hacer frente a las demandas de los pobladores de comunidades de la zona de influencia (en este caso en el valle del Tambo, en Arequipa).

En tanto, se supo que el Gobierno ha convocado a reunión a las autoridades municipales.

Una vez que la empresa consigue el permiso de construcción (que debe ser otorgado por el Gobierno), el proyecto necesita la aprobación de los ciudadanos.

“El problema surge cuando se realizan los talleres en los que se consigue la participación ciudadana, los opositores de un proyecto minero, incluso, se presentan con bombas molotov”, comentó.

MEF. Al respecto, el ministro de Economía y Finanzas (MEF), Carlos Oliva, dijo en una entrevista radial, que sí existen condiciones para que Southern Perú obtenga el permiso de construcción.

“Debemos entender que en un Estado de Derecho debemos cumplir con las normas. En el sector minero hay una serie de normas para dar una licencia de construcción y le corresponde al Estado otorgar dicha licencia. Están dadas las condiciones para dar la licencia de construcción al proyecto”, explicó en RPP.

Tía María es un proyecto de cobre que demandará una inversión de $1400 millones. Se conoce que la empresa confía en desarrollarlo.

Segundo. El EIA que está pendiente del permiso de construcción es el segundo de Tía María, que prevé desalinizar el agua de mar.

 

 

Fuente:https://diariocorreo.pe/edicion/arequipa/tia-maria-southern-respira-porque-el-gobierno-le-ampliaria-el-plazo-del-eia-896313/?fbclid=IwAR224gu_rmY16cfWap1A9V-MFJk5ZPqeZ6fbxoDOSeBLO3qmUT2RGr4r_DA

Chile

MALAS NOTICIAS PARA MINA INVIERNO. BUENAS NOTICIAS PARA PATAGONIA

Por dos votos a favor y uno en contra, el Tribunal Ambiental resolvió que no hay antecedentes nuevos en el proceso que permitan modificar la prohibición del uso de tronaduras bajo la cota 100 metros sobre el nivel del mar, lo que impide extraer cerca del 98% de las reservas mineras del yacimiento.

Un revés sufrió el proyecto Mina Invierno, ya que el Tercer Tribunal Ambiental de Valdivia rechazó modificar las medidas cautelares que existían sobre las tronaduras del proyecto en la región de Magallanes ligado a las familias Angelini y Von Appen.

Por dos votos a favor y uno en contra, la instancia resolvió que no existen antecedentes nuevos en el proceso que permitan modificar la prohibición del uso de tronaduras bajo la cota 100 metros sobre el nivel del mar, lo que impide extraer cerca del 98% de las reservas mineras del yacimiento.

El Tribunal Ambiental de Valdivia estimó que respecto de los antecedentes presentados para modificar la medida cautelar, “la información en ellos contenida es confusa, lo que genera incerteza respecto de los efectos en el componente paleobotánico de las tronaduras autorizadas. Por tanto, aplicando el principio precautorio, resulta más apropiado actuar con cautela, observando la necesaria proporcionalidad respecto de los efectos que tendrá sobre el patrimonio del afectado”.

Según el voto de mayoría, la medida sigue siendo proporcional “porque Minera Invierno S.A. no queda impedida de la extracción de carbón, toda vez que la tronadura es un método complementario a la extracción mecánica, la cual cuenta con autorización vigente y no tiene ninguna restricción”.

El fallo que mantuvo la medida cautelar decretada a fines de marzo puntualizó además que “Minera Invierno S.A. no logra acreditar por qué no puede continuar la explotación del rajo en forma mecánica, en aquellas áreas donde no habrían areniscas grises compactas.”

 

Fuente:http://relaves.org/post.php?id=72

Perú

En Espinar minera sigue cometiendo irregularidades a pesar del inicio de consulta previa

Glencore Antapacay, con su nuevo proyecto Coroccohuaycco, está cometiendo una serie de irregularidades pese a que existe un proceso de consulta iniciado por el Estado. “Son más de 37 años de actividad minera en Espinar y las cosas no han cambiado mucho.

En una reunión sobre empresas y derechos humanos, en la embajada de Suiza, estaban los representantes de algunas empresas mineras que hablaron sobre las buenas prácticas de sus empresas. ¿Buenas prácticas para quiénes?”, se pregunta la abogada del Área de Litigio Constitucional y Pueblos Indígenas del IDL, Maritza Quispe.

Lo que ocurre en esa provincia alta del Cusco es que el Estado no quiere consultar los instrumentos de gestión ambiental, en concreto, la Modificatoria del Estudio de Impacto Ambiental del proyecto Coroccohuaycco. Por otro lado, la empresa minera está comprando tierras de las comunidades campesinas y coaccionando a la población con amenazas. Por ejemplo, es usual que los funcionarios de la empresa les digan:“Si no me vendes tus tierras, nos vamos a retirar, no tendrán trabajo y le quitaremos las becas a sus hijos”.

Maritza Quispe tiene más cuestionamientos: “¿Acaso no están aprovechándose de la necesidad de la población que sigue inmersa en la extrema pobreza, pero cuyos territorios son ricos en recursos naturales? ¿Por qué no se respetan los derechos de estas comunidades siguiendo los estándares internacionales? ¿Por qué hasta ahora el Estado no atiende a las miles de personas en Espinar contaminadas con metales tóxicos? ¿Por qué la población de Espinar sigue tomando agua contaminada con metales tóxicos?

 

Fuente:https://idl.org.pe/en-espinar-minera-sigue-cometiendo-irregularidades-a-pesar-del-inicio-de-consulta-previa/

 

Latinoamerica

Los extractivismos como vicio

Si bien se cita frecuentemente a la moral en muchas cuestiones controversiales de la vida pública, como los extractivismos, las cuestiones de género o la corrupción, la realidad es que no todos están dispuestos a abrazarla. Muchos esgrimen categorías de la moral pero huyen de sus significados, y la convierten en eslóganes publicitarios, mientras que en la realidad la van recortando, encogiendo y restringiendo.

Están muy lejos de apaciguarse las polémicas alrededor de emprendimientos extractivistas como la minería en el sur o el petróleo en la Amazonía, discusiones en las que una y otra vez aparecen argumentaciones morales. Los defensores de los extractivismos insisten en que son buenos y necesarios. Algunos incluso acusan a quienes alertan sus impactos, por ejemplo campesinos o indígenas, como inmorales agentes que impedirían el progreso.

De una manera u otra hay una moralidad que defiende a los extractivismos como algo bueno y correcto, y a quienes denuncian sus efectos negativos los etiqueta como malos o ignorantes ¿Son tan buenos los que promueven explotaciones mineras o petroleras?, ¿Son tan malos los que protestan por la contaminación?

En realidad, la apelación moral en estos debates refleja los intentos de blindar a los extractivismos actuales y presentarlos como una actividad correcta y orientada al bien común, de modo que no embarcarse en ella sería incorrecto. Sería inmoral no continuar siendo extractivistas porque esos dineros financian la lucha contra la pobreza.

Esa ha sido la idea básica esgrimida tanto en Perú y Colombia, como en Venezuela y Bolivia. Con ese discurso se intenta superar la evidencia de los efectos negativos locales (pérdida de áreas naturales, contaminación, violencia) y sostener que más allá de éstos, los extractivismos deben preservarse porque aseguran el beneficio de las mayorías.

Esta peculiar postura moral es la vía elegida por aquellos que ya no pueden recurrir a la ciencia y la técnica para decir que los extractivismos son seguros y no contaminan. A medida que la ciencia convencional suma más evidencia, más se apela a esa moral que descansa en supuestas mayorías pero excluye a las minorías (casi siempre campesinas o indígenas).

Hoy ya es casi imposible afirmar que la contaminación de las mineras no afecta la salud de las comunidades locales. No existe, por ejemplo, tratamiento para la contaminación por metales pesados, como revela la situación de los obreros vinculados a enclaves como los de Antamina o Yanacocha; además, las consecuencias alcanzan a las siguientes generaciones, ya que entre otros efectos, los niños pierden sus capacidades cognitivas.

¿Cómo así entonces defender esta minería como moralmente buena o correcta desde el punto de vista de esos obreros o sus comunidades, si se ha dañado severamente su salud e incluso se afecta a las generaciones futuras?

Muchos de los impactos negativos de los extractivismos están impedidos o sancionados por la ley, pero como se sabe que esas regulaciones no se cumplen adecuadamente o pueden evitarse en un juicio, se mantienen las prácticas contaminantes. Nada impide pensar que los perpetradores de la contaminación saben que no tendrán una sanción jurídica, y que difícilmente pueden ignorar el daño que hacen y a la vez comprenden que menos aún serán sancionados por ello. Estamos ante inmoralidades elevadas al cuadrado.

Inmoralidades así ocurren con otros impactos: por contaminación de suelos o fuentes de agua, al impedir el acceso a la información y a la participación de las comunidades, al desplazar a indígenas, espiarlos o inventarles causas judiciales, y así sucesivamente, hasta llegar al extremo de los asesinatos.

Sin embargo no parece ser un problema suspender la moral respecto a los impactos locales, mientras se defienden a los extractivismos como correctos para el bien de las mayorías, en una suerte de utilitarismo extremo, al estilo de Bentham, pero además deformado: lo correcto sería lo que produce el mayor beneficio para el mayor número de personas… aunque sea a costa de muchas comunidades y de la Naturaleza misma

Para esta rara moralidad empresarial y académica lo correcto son los resultados de una suma aritmética. En una formulación muy esquemática sería como afirmar que no importa el dolor o malestar infringido a unas pocas personas si con ello la mayoría de la población aumenta su gozo y felicidad.

Esa mirada no comprende las restricciones liberales más elementales, tales como advertir que las acciones de unos no deberían dañar o perjudicar a otros. Es por lo tanto una moral recortada o imperfecta, y muy conservadora al estar reñida con las posturas liberales clásicas. Otra paradoja, ya que suele asumirse que esa perspectiva filosófica es la que sustentan los economistas y empresarios que citan la libertad económica para promover los extractivismos.

Aristóteles puede ser un buen compañero para intentar salir de la confusión acerca de la moral. Los extractivismos son un ejemplo de acciones que se apartan de la virtud, tal como la entendía Aristóteles: la comprensión inteligente y consciente sobre lo que se hace. Contrario a la publicidad, que los pinta como expresiones de ciencia y tecnología de punta, son en realidad actividades muy poco inteligentes, que se recuestan en el beneficio económico empresarial a la par que desechan el daño social y ecológico. Si consideramos además que la virtud aristotélica, está referida a las acciones ajustadas a la esencia humana, sería difícil sostener que esa esencia es la de destruir paisajes o contaminar comunidades.

¿Se quiere hablar de moral en los extractivismos? Hacerlo en serio apunta a comprender que la bondad y la justicia se orientan a preservar la vida y salud de las personas y la Naturaleza. Dicho de otro modo: si eres bueno y justo no puedes ser extractivista. Hay un imperativo moral en proteger a las personas dañadas por los extractivismos, como a los ecosistemas que están riesgo.

En consecuencia, aliviar el sufrimiento de muchos e impedir la destrucción de la Naturaleza, requiere abordar cuanto antes las transformaciones que permitan abandonar la dependencia de los extractivismos. No se puede invocar a la moral para defenderlos, sino para buscar alternativas a ellos.

Esto no será sencillo ni se logrará de un día para otro, pero es lo correcto… y lo opuesto a la cháchara moralista con la que se cubre que en la realidad se recorten las consideraciones morales y éticas que nos alejan de las virtudes y nos conducen a los extremos. ¿Cómo llamar a esa situación? Son los vicios, respondería Aristóteles. Esta es la conclusión de esta reflexión: los extractivismos son un nuevo tipo de vicio contra la naturaleza y la sociedad.

 

Fuente:http://www.noticiasser.pe/opinion/los-extractivismos-como-vicio?fbclid=IwAR1SYRlzk4IDyUHX_-OgKYmisnokxRDRKKTWHsDQDn2Xby-kFeLygP99Wzs

Mexico

Semarnat da permiso a minera para construir presa en Jalisco: REMA

La Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA), denunció este martes que el pasado 18 de junio la empresa minera canadiense Endeavour Silver Corp, recibió autorización de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), para la construcción de una presa de relaves, en su proyecto de la mina de plata y oro Terronera, ubicada en Jalisco.

Esta autorización, advierte la organización, pone en evidencia que a pesar de que recientemente se designó como titular de la Semarnat a un prestigiado académico e investigador mexicano, Víctor Toledo, las políticas públicas en el sector minero y medio ambiental siguen al servicio de los grandes capitales.

“El neoliberalismo sigue totalmente vigente por más frases mediáticas que nos impongan, queda en evidencia el estrechísimo margen de maniobra que tiene el actual secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, el maestro en ciencias Víctor Toledo Manzur”.

Es claro advierte la REMA, que “con esta nueva autorización otorgada por quienes se supone cuidan el ambiente, al cambiar de bosques por minería, se ratifica el alineamiento de las instituciones, leyes y procedimientos a favor de los capitales privados”.

“Ya sólo nos falta que la Guardia Nacional también sume, a sus nuevas funciones antimigratorias, algunas tácticas para dispersar y desterrar –ironiza la organización social en su comunicado-, a las peligrosas resistencias comunitarias, quienes son una real amenaza para los capitales porque prefieren cuidar su territorio y los bienes naturales, de los depredadores”.

En su portal de internet (www.edrsilver.com), la minera Endeavor Silver Corp informó –en inglés-, sobre la autorización que obtuvo de la Semarnat, “el permiso final de relaves para el proyecto de la mina Terronera en el estado de Jalisco”.

Es permiso comentó la minera canadiense, es una “autorización para cambiar el uso del suelo en tierras forestales”, que entre otras cosas “le otorga a Endeavor Silver el derecho de almacenar los relaves (también llamados jales), de la mina subterránea de plata y oro de alto grado Terronera, propuesta en una instalación de relaves de pila seca filtrada y segura, adyacente al sitio de la planta propuesta”.

“Se considera que los relaves filtrados de pilas secas representan las mejores prácticas en el sector minero porque los relaves se filtran para reciclar el agua de regreso a la planta antes de apilarlos detrás de una presa de almacenamiento”, explicó.

La empresa minera canadiense informó que las instalaciones de relaves de pila seca, “cuestan más para construir y operar que las instalaciones convencionales de relaves húmedos, pero son más seguras y ‘más verdes’, y representan el futuro del almacenamiento de relaves”.

Con la autorización de la Semarnat, indica la compañía, se planea completar un estudio final de “prefactibilidad mejorado”, lo cual permitirá a sus propietarios canadienses “organizar el financiamiento adecuado para construir el próximo activo principal de Endeavour”. Es decir la entrada en operación de ésta mina la Terronera, en suelo jalisciense.

Para ello después de un período de construcción de dieciocho meses, la mina Terronera se espera produzca más de 5 millones de onzas de plata equivalente (en una proporción de plata:oro de 80:1) durante un mínimo de 12 años de vida útil de la mina, “a un costo total de mantenimiento por onza de plata producida, en el cuartil más bajo de pares de la industria”.

Endeavor Silver Corp es una empresa minera de metales preciosos de nivel intermedio que posee y opera cuatro minas subterráneas de plata y oro de alta ley en México, también con proyectos en Chile.

La autorización de la Semarnat denunciada por la REMA, se produce en un momento de incremento en los precios internacionales del oro. Este martes 25 de junio, agencias especializadas en temas financieros dieron a conocer que el oro alcanzó su mayor precio en los últimos seis años, al cotizarse en 1 mil 439 dólares la onza.

Fuente:https://www.jornada.com.mx/ultimas/2019/06/25/semarnat-da-permiso-a-minera-para-construir-presa-en-jalisco-rema-6075.html?fbclid=IwAR3F-39hvDRyEk5ck-SUP9F84miT3Fje2M_BsanELRFmQfHJ6OswuCO164c