La procuradora agraria Susana Fallas teme que la minera Industrias Infinito esté “evadiendo su obligación” de reparar el daño ambiental, luego de que vendió cinco propiedades que poseía en la zona norte del país. En dos de estas fincas la minera Infinito Gold taló árboles y dañó el ecosistema, amparada en la concesión para sacar oro en Crucitas de Cutris de San Carlos, anulada en el 2010.
“Ellos tenían la obligación de reparar el daño, junto con el Estado. Venderlas no es una forma de reparar el daño, pareciera que están evadiendo la responsabilidad o la obligación que les dio la sentencia de reparar el daño en esas dos fincas que vendieron”, manifestó Fallas.
Este viernes fue suspendida la audiencia en la que se conocería la resolución sobre el pago de daños ambientales, esta vez debido a que la Procuraduría apeló la decisión de la jueza ejecutora que dejó por fuera del proceso al comprador de las fincas.